“Mi silencio había tenido un precio”: el desgarrador relato de Almudena Grandes para desvelar que tiene cáncer
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Almudena Grandes tiene cáncer. Y no se lo diagnosticaron hace poco, precisamente. Sin embargo, lo había mantenido en secreto, con la salvedad de la información ofrecida a su círculo más íntimo, hasta ahora. Una de las escritoras más importantes del panorama nacional de las últimas décadas ha decidido hacerlo público después de una recaída que le hizo perderse la firma de su última obra en la Feria del Libro, precisamente, porque se encontraba hospitalizada por culpa de esta enfermedad sobre la que acaba de sincerarse en la columna con la que cuenta en el diario 'El País'.
"Todo empezó hace poco más de un año. Revisión rutinaria, tumor maligno, buen pronóstico y a pelear", con las palabras con las que hace esta confesión después de haber advertido que nunca antes había tenido que dar forma escrita a nada tan complicado como esto, y justo antes de detallar qué es lo que le ha llevado ahablar de ello justo ahora, después de tantos meses de lucha silenciosa: "Mientras los altavoces de la Feria del Libro de Madrid lanzaban a los cuatro vientos los nombres de los autores que estaban firmando en las casetas, entre ellos el mío, yo estaba en el hospital con una complicación intestinal. Así comprendí que mi silencio había tenido un precio".
Cordon Press
Almudena, que dice sentirse "segura, confiada y fuerte", avanza en su relato explicando que ve este cuadro clínico que le está tocando vivir como "un aprendizaje, nunca una maldición, ni una vergüenza, ni un castigo", y que si ha dado el paso al frente no es por otra cosa que por ser transparente con sus lectores, esos que han sostenido su carrera literaria y a los que considera "muy importantes" en todo ese camino que ha recorrido. Los mismos a los que termina por hacerles una promesa sincera: "Tal vez reaparezca con pelo, quizás sin pelo, con una melena rizada o con el peinado de mi querida Josefina Báquer, como la llamaba mi abuela. Pero prometo solemnemente que volveré a sentarme en una caseta para firmar ejemplares y mirar a los ojos de mis lectores, de mis lectoras".
Una confesión desgarradora, emotiva y muy necesaria para desterrar tabúes. Para convertirse en una más de todos esos rostros conocidos que alzan la voz para hablar de sus enfermedades y tratar de darles una cierta normalidad. Y ella, que cuenta con miles de lectores fieles, es más que apta para ofrecer un discurso de estas características cargado de sinceridad y, sobre todo, de normalidad. Sobre todo, porque se encuentra "muy bien y en las mejores manos".
Día Mundial de la Salud Mental
No era el único mensaje relacionado con la salud que ofrecía este fin de semana. Aprovechando que este domingo se celebraba el Día Mundial de la Salud Mental -y de que otro tipo de dolencias pueden desembocar en problemas de este tipo, de esas que afectan al alma y pueden ser invisibles a los ojos- compartía un post de lo más inspirador en su Twitter. "...no les llames locos porque son enfermos. Aunque puedan impulsarles a cometer crímenes tan horribles como este, las enfermedades mentales son dolencias físicas, igual que las del cuerpo", se podía leer junto a un frgamento de un libro en el que se trataba este mismo tema que ayer inundó las redes sociales en un sano ejercicio de que estamos avanzando con paso ligero para que deje de ser un estigma social.
«... no les llames locos porque son enfermos. Aunque puedan impulsarles a cometer crímenes tan horribles como este, las enfermedades mentales son dolencias físicas, igual que las del cuerpo.»#DíaMundialdelaSaludMental #LaMadreDeFrankenstein #LeemosYAvanzamos pic.twitter.com/K4isDtz95a
— Almudena Grandes (@AlmudenaGrandes) October 10, 2021
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