¿Cómo evitar la retención de líquidos en las piernas durante la cuarentena?
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Desde que se decretó el Estado de alarma y todos nos confinamos en nuestras casas, hemos dejado de hacer deporte y de movernos tanto como lo hacíamos antes. El simple hecho de trasladarnos a nuestro lugar de trabajo ya nos ayudaba a ejercitar las piernas. Ahora, sin embargo, pasamos el día sentados, y el mayor viaje que hacemos es de la cama al sofá y viceversa. Y seguro que muchos nos hemos sentido cansados, a pesar de no haber hecho gran cosa durante el día. Ese cansancio se debe a la pesadez en las piernas, que surge cuando no hay una buena circulación de la sangre.
Sin embargo, la falta de movimiento puede desencadenar otros problemas más serios, como hinchazón, celulitis o arañas vasculares, problemas que, además de ser antiestéticos, afectan también a la salud. Aunque lo más normales que estos problemas aparezcan a partir de los 40 años, un cambio de vida tan brusco como el que acabamos de sufrir también puede propiciarlos. Aquí traemos algunos consejos para evitar que nuestro cuerpo mientras nos enfrentamos al confinamiento.
1. Mantener una dieta equilibrada
Uno de los factores que más afectan a nuestra salud es nuestra dieta. Para evitar la retención de líquidos, los expertos suelen recomendar una dieta depurativa, en la que se incluya mucho líquido (no sólo agua, también infusiones y té), lácteos (yogures y quesos frescos), pescado, carnes blancas, verduras al horno o a la plancha, etc. Además, se recomienda evitar las grasas animales, la carne roja, comidas precocinadas y los fritos, entre otras cosas.
2. Masajes en la ducha
El agua es una de las fórmulas más recomendadas para mejorar la circulación. Los médicos suelen recomendar hacer movimientos circulares en una piscina, pero durante estos días entendemos la dificultad que puede haber para acceder a una, por lo que traemos una gran alternativa: o bien hacerlos sentados en el borde de la cama, con las piernas sumergidas en agua, o bien en una bañera. Eso sí, lo más importante es ir alternando agua fría con agua caliente, y asegurarnos de que el agua llega desde los pies hasta los muslos, para que tenga efecto en toda la pierna.
3. Una buena hidratación
Además del agua, es bueno también aplicarse cremas con acción fría, que refresquen la piel. Muchos expertos recomiendan también masajear las piernas con exfoliantes, mascarillas o incluso aceites esenciales, que reactivan la circulación de la sangre al entrar en contacto con la piel.
4. Descansar por las noches
Es muy importante descansar bien por las noches. Una técnica infalible para mejorar la circulación en las piernas suele ser colocar un cojín debajo de los pies, para que estén un poco más altos que la cabeza. Esto activará la circulación de la sangre y, además, te proporcionará un mayor descanso.
5. Ejercicio físico
Pero, sin duda, lo más importante de todo es no quedarse quieto. Si, tienes que trabajar y eso implica estar sentado. Pero, el rato que tengas para descansar, no te quedes sentado, camina aunque sea por el pasillo unos minutos. Puede que parezca una tontería, pero será suficiente para reactivar la circulación en tus piernas y, aunque no tendrá el mismo efecto que cuando das paseos largos, te ayudará mientras dure el confinamiento.
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