Raquel del Rosario echa la vista atrás y le habla a aquella niña: "El sentimiento de no sentirme valorada"

Raquel del Rosario no se guarda dentro nada que considere que es digno de ser compartido. Sus reflexiones personales y emocionales se han convertido en un clásico de su 'feed' de Instagram. Y acaba de hacer otra. Una que habla de inseguridades o de no sentirse valorada. De cómo, cuando una tiene el sueño de niña, hay quien trata de tirar el castillo de naipes levantado con la imaginación. "Me encantan esas historias que cuentan algunos grandes artistas sobre sus comienzos, cuando determinado amigo, profesor o familiar les dijo que no valían para eso, que buscasen otra forma de ganarse la vida. 'Y aquí estoy, mira dónde he llegado'", es como comienza ese texto que sirve para reflexionar mucho.

"Me encantan porque son el claro ejemplo de fidelidad a la grandeza innata de cada uno. Siempre recuerdo (con mucho cariño) a aquel profesor de música en EGB que no me seleccionó como una de las voces del coro sino para marcar el ritmo con unas claves. No me lo tomé como un 'tu voz no es válida' o un “esto no se te da bien”, sino como un reto, porque llevar el ritmo con las claves era mucho más complejo para mi que cantar. Cantar hubiese sido lo fácil", continuaba, echando la vista atrás.

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Preguntas para responder

Y lo que sigue es una confesión sobre cómo estos días se ha centrado en aquella etapa de la infancia: "Estos días he tenido muy presente a aquella niña y lo conectada que estaba con su grandeza. Siempre que me encontraba en una situación similar, mi diálogo interno nunca me hacía sabotaje, al contrario, siempre me recordaba lo bonito en mí, me ayudaba a identificar el aprendizaje, aquella vocecita era una constante invitación al amor propio". ¿Por qué? Pues responde... aunque sin ahondar demasiado: "Una serie de acontecimientos en las últimas semanas han despertado en mi el sentimiento de no sentirme valorada. Y cuando me conecto con aquella niña que a su vez me conecta con mi grandeza, ella me lanza preguntas: ¿Por qué permites que este proyecto, persona o idea determinen tu valía? ¿Quién te da tu valor? ¿Qué tipo de aprobación buscabas? ¿Por qué no has puesto límites? ¿Por qué sigues buscando fuera lo que ya está en ti?".

"Crecí en una familia donde se me dijo que la divinidad era algo externo, aunque mi certeza era otra. Siempre que escucho mi canción favorita 'Losing my religion', de R.E.M, pienso que la traducción literal del título, podría ser también el de mi misión de vida. Esta vida, que como aquel profesor, vuelve a ponerme las claves entre las manos y me dice: 'El ritmo lo marcas tú", rematan esas líneas que, no nos cabe la menor de las dudas, van a servir para remover muchas conciencias al paso de los ojos por las líneas.