Irene Rosales reaparece tras la muerte de su madre muy emocionada: "Me despedí sin quererlo"
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Irene Rosales ha vuelto a trabajar en el programa que colabora, 'Viva la vida'. Es su primera reaparición tras el fallecimiento de su madre.
Un recibimiento que ha sido muy emotivo y del que Irene aseguraba que se encontraba muy nerviosa a lo que la presentadora Emma García intentaba tranquilizarla antes de entrar a plató. Fuera entre bastidores ya se escuchaba los aplausos del público para animarla.
Nada más sentarse quería agradecer todo el cariño recibido por parte de sus compañeros y comenzaba entre lagrimas a decir: “Me da mucha pena que mi pequeña ausencia se haya debido por esta perdida”. Una pena que le es más fácil de llevar gracias al apoyo del equipo y lo fácil que se lo han puesto.
Hablaba por primera vez de como se siente tras la perdida de su madre Mayte: “Estoy destrozada porque es algo ha sido muy pronto y muy de golpe. Mi madre era mis manos mis pies mi cabeza. En dos meses y poco se ha ido...”, aseguraba.
Emma García le preguntaba si pudo despedirse de su madre, algo muy importante para una persona cuando pierde alguien. Ella respondía muy emocionada: “Se fue conmigo a solas y en su casita. Me despedí sin quererlo, no lo creía no daba crédito. Sabía que no me podía ir lo notaba”.
Tener dos hijos y un marido le hacen que tenga que continuar su vida pero tiene un gran sentimiento de culpabilidad cada vez que da un paso. “Me he machado mucho por cada paso que hago. Me siento culpable, me pregunto si estaré haciendo algo malo. Cada vez que salgo a despejarme me siento muy culpable”.
Confiesa que aún se encuentra en proceso de pasar página tras el fallecimiento de su madre #VivaLaVida272 https://t.co/CCGpEOlRM7
— Viva la vida (@VivaLaVidaT5) February 16, 2020
Al igual que volver al trabajo le hace sentir mal, pero lo único que le alivia es que cuando estaba muy mala su madre le decía: “Que fuese a trabajar y hoy estoy aquí por ella, le gustaría verme aquí”. Lo único que pide es tiempo, tiempo para procesar y tiempo para curarse.
Su familia está muy unida, los cinco hermanos son como una piña y han estado hasta el final junto a su madre todos juntos. Y siguen junto apoyándose. La enfermedad de su padre hace que en ningún momento se hayan separado de él. “Mi padre es a ratito, no es muy consciente. Esta con todos nosotros y no le vamos a dejar”, confesaba.
El programa le daba una sorpresa y le ponía un mensaje que le había enviado su marido Kiko Rivera en este día tan especial que se reincorporaba. Una declaración absoluta de amor: “Te quiero, te amo por encima del mundo, gracias por existir”. Irene muy emocionada, sin parar de soltar las lágrimas aseguraba que su marido ha sufrido como un hijo más y que: “Es el que más me está atendiendo, no sé si él no hubiese estado”. Su compañero Luis Rollán no podía prácticamente hablar de la emoción que le ha supuesto todo lo que Irene ha confesado y ha relatado.
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Una vuelta muy emocionante y emotiva. ¡Mucho ánimo desde aquí Irene Rosales!
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