La súplica de Ana Obregón a su padre, ingresado en el hospital: “Por favor, quiero volver a sonreír”
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La vida ha vuelto a poner a prueba a Ana Obregón. Tras el fallecimiento de su hijo Álex Lequio hace un año y el de su madre el pasado mes de mayo, ahora ha sufrido un nuevo revés que le tiene con el corazón roto en más pedazos. Su padre, de 95 años, se encuentra ingresado en el hospital, una pesadilla para ella que ya pasó lo mismo en otras dos ocasiones con las personas más importantes de su vida. Los recuerdos que se le vienen a la mente no son nada buenos y ha querido mandarle un mensaje a su padre.
Su padre es ahora mismo su razón de vivir y el hombre que le saca una sonrisa todos los días, y por eso no se puede permitir perderle tan pronto. Junto a sus hermanas Celia y Amalia, dos de sus mayores apoyos, no se separa ni un segundo del patriarca de una familia a la que se le ha vuelto a romper el corazón ya que volver a ese hospital es recordar tiempos pasados que no fueron nada buenos y que les inundan de tristeza, algo que se puede apreciar en sus rostros de cansancio y dolor.
La petición de Ana Obregón a su padre
“Papá, estás luchando positivamente en ese hospital como “el campeón” que has sido toda la vida. Un campeón de 95 años”, ha comenzado diciendo Ana Obregón en un mensaje que ha compartido en su cuenta de Instagram, dirigido a su padre. Unas bonitas palabras que han venido acompañadas de una petición a su progenitor, al que no quiere perder para nada del mundo y por eso le pide que siga luchando y que no le abandone. “Yo soy muy egoísta y necesito estar más tiempo contigo porque no sé hasta qué punto el ser humano puede aguantar tanto dolor si te fueras ahora”, ha expresado con mucha tristeza.
“Entiendo que quieras reunirte con Mamá pero por favor, quiero volver a sonreír contigo… un poco más…”, le ha pedido encarecidamente. Unas desgarradoras palabras que ha querido hacer públicas después de que la revista Semana publicara la noticia del ingreso hospitalario de su padre en la clínica Ruber de Madrid, donde se encuentra acompañado y arropado por sus hijas en todo momento. “Gracias por los mensajes de cariño, ahora entenderéis mi silencio. Hay veces que no existen palabras”, ha concluido, agradeciendo a todos sus seguidores la preocupación por el estado de salud de su padre.
La pérdida de su hijo, una huella imborrable
Unos días antes Ana Obregón mostró una nueva imagen con su hijo en brazos y que, al lado, utilizaba una definición de lo que es un hijo, obra de José Saramago: "Hijo es un ser que nos prestaron para hacer un curso intensivo de cómo amar a alguien más que a nosotros mismos, de cómo cambiar nuestros peores defectos para darles los mejores ejemplos. Ser padre o madre es el mayor acto de coraje que alguien pueda tener, porque es exponerse a todo tipo de dolor principalmente de la incertidumbre de estar actuando correctamente, y del miedo a perder algo tan amado. PDT. Gracias por esta maravillosa definición, humildemente añadiría: porque si pierdes un hijo mueres con él , y solamente te queda un inmenso dolor y la obligación de seguir viviendo", concluía ante de recordar que ya eran 16 meses los que han pasado desde que la pena de la muerte de su único hijo lo invadiera todo en su vida.
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