Los 3 guiños de Dani Martín a su madre en el Concert Music Festival para hacerla protagonista: "Es horrible"
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Hay pocos artistas más idóneos que Dani Martín para abrir o cerrar un concierto. Máxime si el escenario es en pleno Cádiz. Es cierto que, para él, el rincón perfecto es Zahara de los Atunes, pero Chiclana de la Frontera era la parada que tenía con su 'Qué caro es el tiempo'. Efectivamente, al madrileño le correspondía le honor y la responsabilidad de cerrar una nueva edición del Concert Music Festival. Lo de Zahara no lo decimos nosotros, sino el propio artista, que lo dijo sin tapujos y bromeando con el calor y el viento de levante para intentar que la gente no vaya y estar más a gusto. Todo entre risas antes de dar paso a algunos de los temas más emblemáticos de su carrera -tanto en solitario, que ese mismo día celebraba 12 años- como con esa etapa de El Canto de El Loco que le lanzó a la fama.
'Puede ser', 'Qué bonita la vida', 'Cero' o 'Peter Pan' no eran más que el preludio de uno de los momentos más tiernos de la noche. Ese en el que, micrófono en mano, reveló que las dos personas más importantes de su vida se encontraban entre los presentes en esa noche en el Poblado de Sancti Petri. Efectivamente, eran su padre y su madre. A esta última le tocó saludar a los fans de su hijo, puesto que estos no paraban de pedírselo a gritos desde el patio de butacas. ¿Qué hizo él? Recurrir de nuevo a la ironía y el sentido del humor para echarle en cara ese sofá verde dedudoso gusto decorativo que presidía el salón de casa y que, a la postre, serviría como punto de partida para la banda que le sirvió para hacerse un hueco en esta música en la que ocupa un puesto de honor desde hace un par de décadas.
Esto le daba pie a contar cómo su primo David y Chema, los otros dos integrantes de El Canto del Loco, no estaban por la labor de volver con aquel grupo que tanto le dio al pop rock español, y que como la honestidad debe estar por encima de cualquier cosa, por eso el regreso ni se había producido ni tiene visos de hacerlo -al menos, a corto plazo-. Acto seguido, entonaba su 'No, no vuelve' con el que cebó toda la campaña de regreso de esta gira, con su disco bajo el brazo, con el que está colgando el cartel de 'sold out' concierto sí y otro también.
Guiños para sus seres queridos
Dentro del 'show' que tiene preparado en cada una de esas paradas, siempre intercala pellizcos de dedicatorias a personas fundamentales en su vida. Por ejemplo, no desaprovechaba la oportunidad para felicitar a su madrina, Carmen, que estaba de cumpleaños. Tampoco para hacer promoción de un grupo como Las Ginebras. Lo hacía con el gancho de que su batería, Juls se había acercado a escucharle a pesar, en sus propias palabras, de que ellas hacen mucho mejor música que la de un hombre que, de nuevo tras entonar clásicos que nos sabemos de memoria -'Volver a disfrutar' y 'Ya nada volverá a ser como antes'-, tiró de complicidad con su madre para hacerla protagonista...
...y para lanzale una 'pullita' por esa paella que "es horrible". Quizás por eso recalcaba que llevaba 20 años sin hacerla. Ella, una mujer a la que compara con Christina Aguilera y de la que, confesaba, tenía un halo hippie, pero, a la vez, a la que lanzaba las flores pertinentes poniendo el acento en que le ha enseñado los mejores valores del mundo. En CADENA 100, para quien es más un amigo que un mero artista de los que conforman la mejor variedad musical, damos fe de ello. Para su padre, del que subrayaba su buena mano para la restauración de muebles, también había piropos: no le dolían prendas en reconocer que, cuando camina por Zahara, siempre le dicen que el hombre al que tiene como referente, es mucho más guapo que él.
Era el turno de 'Tal como eres' y de que el público se desgañitara con 'Una foto en blanco y negro', 'La mentira', 'Que se muera de envidia', 'Los huesos'... Dani cabalgaba por su repertorio a un ritmo tan vertiginoso que, casi sin darse cuenta, comienza a llegar, de manera irremediable, al final. Se hace la oscuridad y, a pesar de que sus seguidores le piden que continúe, él cierra con un 'Zapatillas' que es el colofón perfecto para un nuevo año del Concert Music Festival para el que ya comenzamos la cuenta atrás para el siguiente verano.
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