Amador Mohedano, muy duro con el testimonio de Rocío Carrasco: "Es lo peor que hay, es rastrero"
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Amador Mohedano ha hablado. Le ha costado, pero ya sabemos cuáles han sido sus sensaciones tras ver al detalle la docuserie de su sobrina Rocío Carrasco y cómo ha afectado a la familia cada uno de los movimientos de esta sin contar con ellos. Lo ha hecho con una extrensa entrevista que publica este miércoles la revista 'Semana'. Una charla en la que se desahoga, largo y tendido, para disipar muchos de los interrogantes que se pudieran haber generado tras escuchar a la hija de su hermana Rocío Carrasco.
Comienza dejando claro que quiere mucho a su sobrina, pero... Sí, hay un 'pero' que no oculta: "Tiene ese defecto, esas cosas... Ella ha decidido su vida sin nosotros y ya está". El exmarido de Rosa Benito reconoce haber visto "de principio a fin" el documental 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' y asegura desconocer si su hermana Rocío era conocedora de ese calvario que ha relatado Carrasco que experimento con Antonio David Flores. Sobre este, Amador dice: "Todo el mundo sabe que yo con Antonio David he tenido una guerra de separación, pero todo esto que ha pasado y todo esto que ha contado me parece muy triste. Si es tal cual, a nosotros nos duele".
"El conflicto que haya podido tener mi sobrina con Antonio David me parece una barbaridad so es yal cual todo lo que cuenta, pero si yo tengo un problema de este tipo, lo normal es que informe a la familia", añade, haciendo hincapié, además, en que su hermana Rocío jamás tuvo miedo del marido de su hija, tal y como se ha podido leer en varios titulares en estos meses. Lo que sí reconoce es que el exguardia civil le advirtió que no conocía su "otro yo" y que él tuvo que frenarle los pies.
Dolor por los hijos de Carrasco y Antonio David
Para él, el verdadero pesar lo tiene con los hijos de Rocío Carrasco que son, para él, quienes lo peor lo están pasando en todo esto. "Lo que realmente me genera una pena muy grande es porque los que están sufriendo son mis sobrinos". Y continúa: "Pienso en el daño a su hija y a su hijo, y eso es lo que no va a borrar nadie. Todo me parece muy exagerado". Además, aprovecha para lanzar una acusación muy dura contra Rocío: "Mi sobrina jugó con mi trabajo y con el pan de mis hijos también, y para mí es lo peor que hay, es rastrero".
Cordon Press.
Tampoco escapa a las preguntas sobre esa segunda parte de la serie en la que Rocío ya ha advertido que va a explicar, uno por uno, por qué ha dejado de hablar a cada uno de los miembros de su familia: "Estoy preparado para la nueva docuserie, porque no tengo nada que ocultar. Que a mí me dé un poco más fuerte por todos los enfrentamientos que hemos tenido, pues seguramente, pues también me lo espero". Añade que lo hace "para arrasar ya con todo". Y lanza una frase de lo más reveladora: "Mi sobrina no quería que Ortega saliese ni siquiera mencionado en la serie sobre mi hermana". Entonces, ¿está dejando caer que ha sido obligada a incluir esa parte tan jugosa de sus vivencias?
El remate de la entrevista versa sobre un tema que no ha prestado discusión durante todos estos años y en el que la inmensa mayoría de la opinión pública está de acuerdo: "Estoy convencido de que si mi hermana Rocío viviera no estaríamos distanciados, ni mucho menos, porque ella, aparte de artista, tenía su mente muy clara, era muy familiar por encima de todo. A mí me reñía como su fuera su hijo".
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