El significado detrás del vestido de Ana Obregón en 'Mask Singer' y el emotivo guiño a su hijo, Álex Lequio
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Era uno de los momentos más esperados de esta semana en la televisión desde que el lunes se conociera que Ana Obregón aparecería en 'Mask Singer' en el papel de investigadora. La actriz, a quien la vida asestaba otro durísimo golpe hace un par de semanas con la muerte de su madre, decidía salir de su encierro y colocarse, de nuevo, delante de los focos. Y, una vez más, como sucedió cuando aceptó presentar las Campanadas de TVE, era Susana Uribarri quien le recomendaba que aceptara este pequeño trabajo, porque a su cabeza le iba a sentar bien para airearse.
Y así fue. Ana volvió a dar una lección de cómo se hace espectáculo. De cómo se puede mantener la entereza ante las cámaras y, a la vez, rendir tributo a esos dos seres queridos que ha perdido con 13 meses de diferencia. Se prestaba al espectáculo y entraba bailando y oculta bajo una máscara. Tras quitársela, y sin poder evitar que los ojos se le humedecieran por la emoción, pronunciaba sus primeras palabras al lado de Los Javis y Paz Vega: "Es un programón, yo he estado en mi retiro como todos sabéis y lo único que he visto es este programa". Pero, también tenía hueco para demostrar su sobradamente conocido sentido del humor: "Me iba a traer las lentillas pero las puse por la noche en el vaso y me las he bebido".
Su recuerdo más emotivo
"Me hacía ilusión porque lo vería con mi madre que acababa de salir del hospital", contextualizaba sobre cuándo le ofrecieron esta oportunidad, antes de que su madre falleciera, el pasado 22 de mayo. "Esta noche se emite y sé que lo verá desde un lugar privilegiado muy bien acompañada", aprovechaba para recordar a su madre y a su hijo a la vez. "El programa de esta noche es alucinante, y os lo dice alguien que lleva 40 años haciendo televisión", añadía Obregón, encantada de haber dado el paso de regresar a un medio que conoce como la palma de su mano.
Obregón dio un recital de cómo ir mezclando esas pinceladas de ironía con las que hacer reír al público con la emotividad de los guiños hacia su madre y su hijo, Álex Lequio. Porque los tiene presentes en todo momento. Ya sea descansando en Mallorca, donde tiene menos presión de los focos, o ante la audiencia de Antena 3, que ayer agradeció ese atrevimiento para volver a pisar un plató en medio de su luto. Lo hizo sin abandonaro del todo. Porque, como explicó, ese vestidazo diseñado por Alejandro de Miguel elegido para la ocasión, era de color blanco porque, en muchas culturas, simboliza el luto.
Antena 3.
"Y yo aún sigo de luto y Alejandro de Miguel ha tenido mucha paciencia conmigo, ha sido un poco complicado. El blanco es el color del luto en otras civilizaciones y él ha obrado un milagro", explicaba sobre su atuendo. Un vestido que encargó a ese hombre que tan bien la conoce, que en tantas ocasiones la ha vestido y que, además, fue quien realizó el vestido con el que dio la bienvenida a un 2021 que esperaba fuese más esperanzador que el 2020 que dejaba atrás y que ya le ha vuelto a dar uno de esos golpes que tanto daño hacen.
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