La decepción de P!ink por parte de las críticas de la prensa a 'Trustfall': "Nunca he mentido"
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Han pasado unos 10 días desde que P!nk, después de varios adelantos, nos mostrara el resultado final de 'Trustfall'. Un disco con el que ella está más que satistfecha, pero que, para parte de los medios de comunicación parece no ser tan redondo. O, al menos, eso es lo que ella ha percibido de algunas de las críticas que le han realizado. Así lo ha expresando en su cuenta de Instagram, al lado de una imagen en la que aparece con su hija y donde comienza de una manera muy rotunda: "Estoy muy triste y decepcionada por la narrativa que rodea a parte de la prensa que he estado haciendo en torno a mi álbum 'Trustfall'".
"Aunque parte de la responsabilidad recae en mí, en mi incapacidad para mentir y en mi extraña habilidad para compartir más de la cuenta, mi verdadera decepción radica en el hecho de que el arte nunca puede ser el centro de atención cuando eres mujer. El hecho de que haya creado uno de los álbumes más bonitos con la gente más increíble, de que me haya dejado la piel cantando, de que haya hecho de mi mismo alguien vulnerable -once álbumes, vendiendo estadios enteros, criando buenos hijos, constantemente empleando a cientos de buenas personas, gente trabajadora-, la única cosa que te preguntan una y otra vez es algo tan tonto como qué fue de tu yo de hace 20 años", suelta de carrerilla todo ese malestar.
Contundencia y responsabilidad
"Asumo la responsabilidad también. Estoy fuera de práctica para esquivar la mierda que nos lanzan a las mujeres trabajadoras. Lo noto. Demasiado. Pero nunca he mentido. Y por cada una o dos mujeres con las que he tenido problemas, hay cientos a las que he felicitado, apoyado y querido. Pero no hablamos de eso. Me pregunto cuándo fue la última vez que Bradley Cooper o Robert DeNiro fueron preguntados en una entrevista tras otra sobre alguna discusión que hubieran tenido. ¿Y Christian Bale? Con ellos nos ceñimos al arte, ¿no? Me gustaría tener la misma oportunidad", reivindica antes de continuar, con una especie de examen de conciencia: "También creo en la disculpa auténtica y en asumir tus errores. Debería decir menos cada vez. Algo en lo que estoy trabajando. Este fue un buen recordatorio".
El final está a la altura de toda esta reflexión: "Mi deseo es compartir los dolores y las celebraciones de esta vida desordenada a través de la música y en el escenario. Y lo he logrado. Increíble y consistentemente. Por Christina: ya sabes a qué atenernos. Resuelto. Adelante y hacia arriba. Y gracias a todos por escuchar y por los 25 años... de amor y apoyo. Paz".
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