El complejo pasado de Jennifer López antes de convertirse en una estrella

La cantante está considerada como una de las personas más influyentes del mundo, pero empezó desde un lugar muy humilde
Jennifer López

Tiempo de lectura: 2’

Jennifer López ha celebrado esta semana su 50 cumpleaños rodeada de todos sus amigos y familia, en una fiesta por todo lo alto llena de lujos y extravagancias. Como regalo de cumpleaños recibió de su prometido un Porsche valorado en unos 175 mil euros y vive en una increíble mansión en Los Ángeles con su propio cine, terraza y piscina. Seguramente si de niña le hubiesen dicho que lograría todas estas cosas no se lo hubiera creído, porque sus inicios fueron muy distintos.

JLo nació en el barrio del Bronx en julio de 1969. Hija de padres puertorriqueños, su padre era vigilante de seguridad y su madre maestra de jardín de infancia. Al principio vivían en un pequeño apartamento todos juntos, pero conforme fue creciendo sus padres pudieron permitirse trasladarse a una casa. Desde pequeña, con tan solo cinco años, la artista ya comenzó a bailar y cantar e incluso entró a formar parte de una escuela. Tuvo siempre claro que se quería dedicar al mundo de la música o de la interpretación, aunque sus padres no lo veían igual que ella.

Cuando le reveló a su familia su intención de convertirse en una “famosa estrella de cine” sus padres no lo aceptaron y le obligaron a inscribirse en una universidad, aunque tan solo aguantó un semestre. Debido al conflicto que se generó Jennifer terminó independizándose y mudándose a Manhattan para estudiar canto, baile y actuación. No fueron tiempos fáciles para la artista ya que ella misma ha confesado que recuerda “que sólo comía un porción de pizza al día cuando era bailarina. Así era como vivía, hice esto durante algunos años antes de conseguir mi primer gran trabajo y no lo cambiaría por nada del mundo”.

Tras mucho esfuerzo y dedicación, Jennifer consiguió en 1997 su primera nominación al Globo de Oro y, a partir de ese momento, toda su carrera creció exponencialmente, ya que incluso consiguió ser la primera latina en cobrar más de un millón de dólares por una película. Ahora es considerada como una de las mujeres más influyentes en todo el mundo, pero sus orígenes le ayudan a valorar todo lo que tiene ahora y es capaz de conocer lo que cuesta el éxito y la fama.

Relacionados

CADENA 100