Meghan Markle y el príncipe Harry, al límite: lanzan un comunicado para frenar los últimos e incómodos bulos

Poco antes de que naciera su hijo Archie Harrison Mountbatten-Windsor, Meghan Markle y el príncipe Harry se mudaron a Frogmore Cottage, después de haber hecho una reforma integral en la residencia.

El nuevo hogar está situado el condado de Berkshire y próximo a Windsor, y aunque se les veía felices, la pareja real ha tenido que poner punto y final a través de un comunicado a todas las informaciones que se han filtrado ''falsas''. Y es que según 'Daily Mail' los vecinos de Meghan y Harry habían recibido unas prohibiciones formales de protocolo con el trato a la familia real, ahora vecinos del barrio. Tal y como filtró el medio citado ''los residentes en esta zona tienen prohibido hablar con la pareja si se encuentran por la calle y tampoco podrán pedirles ver a su bebé ni tocar a sus perros. Tampoco pueden ofrecerse para cuidar al pequeño Archie ni a otros hijos que puedan venir en el futuro ni hacerles llegar ningún tipo de correspondencia a su domicilio'', aseguraban por fuentes cercanas al vecindario.

Pues bien, Meghan Markle y el príncipe Harry no han tenido más remedio que salir a través de un comunicado a desmentir haber hecho prohibiciones a sus vecinos para proteger su privacidad. El propio Palacio de Buckingham emitió un escrito oficial para zajar la polémica que señalaba a los Duques de Sussex ''de haber enviado una serie de reglas a los habitantes de Frogmore Cottage, en las que se les prohibía hablar con la realeza o pedir ver al bebé Archie''. Rotundamente falso.

Durante los últimos meses Meghan se ha visto en el ojo del huracán y son muchas las informaciones que no dejan de salir analizando y cuesitonando sus actitudes. Según la prensa británica, sus desencuentros con la Casa Real son contínuos: desde la alimentación de pequeño Archie a su educación o elección de niñeras. ''En nada se ponen de acuerdo y está generando mucha crispación en la familia''.

Un nuevo frente que parece poner el foco en Meghan y definirla como una ''mujer complicada'', algo completamente opuesto a la imagen que la ex actriz proyecta. En todo este tiempo, Markle ha evitado en enfrentamiento y responder a ninguna de las polémicas en las que se le han envuelto. Sin embargo, en esa ocasión ha sido el propio Palacio de Buckingham quién ha visto conveniente frenar por completo los bulos que manchan la imagen de Megan, que se está adaptando rápidamente a todo lo que conlleva formar parte de la Casa Real.