Las extrañas coincidencias premonitorias de Raquel del Rosario y su significado: "El cierre de un ciclo"
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Raquel del Rosario se ha acostumbrado a contarnos en su perfil de Instagram todo lo que tiene que ver con ese plano más espiritual de una mujer que, hace años, nos encandiló con su voz como líder de la banda El sueño de Morfeo. Alejada de la música, con la salvedad de esa colaboración que nos regaló a principios de año junto a un joven Noan, la canaria ya nos contó durante su entrevista en CADENA 100 que está convencida de que este será un año de cambios. Así que, puede que esa serie de extrañas concidencias que nos ha narrado en su último 'post' de Instagram formen parte de la transformación que siente que va a producirse.
Al lado de 7 fotos y un vídeo, la artista comenzaba escribiendo, para ponernos en situación de que no ha tenido unas jornadas buenas en lo que al sueño respecta: "Anoche logré dormir profundamente por primera vez en muchos días. Llevaba más de una semana con el sistema digestivo sanando algo, sumado a ese primer celo de Lyra... Esta mañana escuché a Leo jugar desde temprano, vino a la cama y me pidió el desayuno, le dije que enseguida iba, pero volví a dormirme profundamente".
Un viaje espiritual
Era momento de desvelar qué era lo que la tenía tan atrapada a la cama: "En ese sueño, alguien que parecía un guía espiritual me explicaba que el color de los gatos estaba asociado a su misión, le pregunté por el color negro, me dijo: 'Los gatos negros representan a los niños no aceptados'. Justo en ese momento me despertó Lyra maullando en la puerta". Y continuaba, para ponernos en situación: "Últimamente estoy teniendo muchos sueños de este tipo". De nuevo, su niño intentaba sacarla de esa espiral, sin éixto alguno: "Leo volvió a llamarme pero me encontraba como paralizada en ese extraño limbo entre la vigilia y el sueño. En ese momento me vino a la mente una persona que hace tiempo me habló sobre sus sueños vívidos y recurrentes, me pregunté cómo estaría, ya que hacía mucho que no sabía de ella ni habíamos vuelto a hablar".
"Cuando por fin logré despertarme del todo, encendí el teléfono y vi que tenía un mensaje suyo,había leído lo de los conciertos en Asturias y me escribía por ese motivo", prosigue en esa primera 'casualidad' que le daba paso a seguir narrando todo lo sucedido en esa jornada: "A media mañana tuve que ir a Los Angeles a hacer un recado, voy a la ciudad en contadas ocasiones ya que me agobia mucho el tráfico y, por zonas, su energía. Vi la secuencia 999 en varias matrículas durante el trayecto, un número que simboliza el cierre de ciclos, y me pareció curioso ya que el recado que me dirigía a hacer, era un favor que alguien me pedía debido a una mudanza por cambio de ciudad, el cierre de un ciclo en su vida".
La Raquel 'antigua'
"Puse la radio, algo que no suelo hacer ya que me gusta conducir en silencio, por algún motivo seleccioné la emisora de música clásica", era otra de las situaciones que le iban a servir para la experiencia mística a la que iba a abrazarse posteriormente: "La canción que sonaba era realmente preciosa, me llevó a un estado de calma absoluto. La busqué con Shazam y en la pantalla apareció un icono antiguo de la virgen con su hijo en brazos. Al llegar, salí del parking y en un pequeño mercadillo vi una especie de medallón con el mismo tipo de imagen antigua de la virgen. Aproveché para dar un paseo por algunas tiendas. Me hizo gracia ver el estampado del sol antiguo en algunas prendas, una imagen que veo de forma sincrónica desde hace unas semanas".
Raquel no escatima en detalles de todo lo que experimentó en unas horas dignas de un guion de cualquier serie de alguna de las plataformas digitales tan de moda en nuestros tiempos: "Me di cuenta de lo mucho que había cambiando en los últimos años mientras miraba los percheros sin mucho interés ni entusiasmo, cuando antes no hubiese dejado uno sin analizar/probar. Al rato me escribieron unos amigos para enviarme la foto de una campaña de moda que hice hace muchos años, 'mira lo que teníamos por casa'. Me hizo gracia ver a aquella Raquel 'antigua', antigua como la imagen de la virgen, como el sol antiguo, antiguo como lo que mi estómago estuvo sanando estos días. Y le di las gracias una vez más, porque sin esa versión mía no existiría tampoco esta. Pd: El último vídeo creo que es un 'glitch' en la Matrix".
