Los cinco trucos para tener una cara perfecta sin ningún producto nada más levantarte

La alimentación, el domir mal, el estrés... son muchos los factores que influyen a la hora de amanecer con mejor o peor cara, aunque hay puntos que ayudan

 

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Actualizado 19 FEB 2020

El drama de madrugar es que vamos casi siempre con el tiempo justo. Ducharse, desayunar rápidito y corriendo salimos a trabajar o a llevar a los niños al cole.

Pero el drama se intensifica cuando encima nos miramos al espejo y vemos esa carita mañananera. ¡Madre mía qué mala cara! Pues no todo el mundo tiene la oportunidad o el tiempo para mejorarlo con maquillaje, así que estos sencillos trucos pueden hacer que te levantes con mejor cara.

 

Una correcta alimentación

Una buena alimentación y una vida saludable es una de las claves para tener un buen rostro. Los alimentos naturales y no procesados son los que harán que nuestra piel se encuentre radiante y nutrida. Otra de las cosas esenciales es estar bien hidratado.

Un masaje facial

Durante nuestra limpieza diaria de la cara deberemos dedicarnos tan solo 5 minutos al día a masajear a nuestra cara. Movimientos que nos ayuden a arrastrar la suciedad de arriba y abajo. Además de utilizar nuestra crema hidratante y darnos pequeños toques con la yema de los dedos. Esto hará que se liberen las tensiones del día.

 

Dormir con la cabeza y el cuerpo a diferente altura

Parece una tontería pero si nos tumbamos de manera que la cabeza esté más alta que el cuerpo evitaremos que nuestros líquidos se acumulen en nuestro rostro. Y hará que que te despiertes con menos bolsas e hinchazón.

Descansar entre 7 y 8 horas

Es una de los consejos que más nos dan para todo pero es verdad. Pero es el tratamiento más milagroso. Al igual que nosotros y nuestro cuerpo la piel también necesita descansar. Dormir entre 7 y 8 horas es imprescindible para que ésta tenga tiempo suficiente para regenerarse, eliminar el cansancio y estar luminosa al día siguiente.

 

Lavarse la cara con agua fría

Por la mñana lavarnos con agua fría hace que se estimule nuestras circulación y hará que las toxinas salgan al exterior y las expulsemos. Si eres de las personas que se levantan con la cara hinchada, en concreto en la zona de las bolsas y ojeras, con este truco notarás mejoría.