El debate alrededor de las declaraciones de Lily Allen sobre la maternidad: "Lo arruinaron todo"
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Una exitosa carrera a sus espaldas respaldan a una de las artistas prodigio de la década de los 2000: Lily Allen. Apenas era una adolescente cuando se situó por primera vez en lo alto de las listas más importantes a nivel mundial con su primer álbum, 'Smile'. Una trayectoria brillante que, según ha confesado, se vio nublada por la maternidad. En una reciente entrevista, la actriz ha confesado que el nacimiento de sus hijas fue el detonante de que no pudiera continuar su carrera en la música. "Realmente nunca tuve una estrategia en lo que respecta a mi carrera, pero sí, mis hijas arruinaron mi carrera. Las amo y me completan, pero en términos de estrellato pop, lo arruinaron por completo", desveló la cantante. La artista tomó la decisión de permanecer del lado de sus hijas, dejando en un segundo plano sus proyectos en la música cuando se encontraba en su momento más complicado. Sin embargo, cuando decidió regresar, casi seis años después, las cosas habían cambiado.
La ausencia de sus padres en su infancia y juventud hizo mella en su salud mental. Algo que no quiso repetir en la crianza de sus hijas: "Me molesta mucho cuando la gente dice que puedes tenerlo todo porque, honestamente, es imposible. Algunas personas eligen su carrera por encima de sus hijos y esa es su prerrogativa, pero mis padres estaban bastante ausentes cuando yo era niña y eso me dejó algunas cicatrices feas"
La cantante también ha hablado sobre los problemas de adicción que arrastraba desde la adolescencia. La artista confesaba en una ocasión el comienzo de su relación con las sustancias estupefacientes: "Empecé a engañar a mi marido y siempre bebía mucho alcohol para aliviar las drogas. Luego me di cuenta de que me levantaba por la mañana y me tragaba esas mini botellas de vodka o whisky, lo que fuera, sin las drogas, nunca más". Lily parece haber superado sus problemas con las drogas y el alcohol: "Una gran parte de la sobriedad es rendirse y dejar que Dios, de la manera que quieras creer en eso, tenga un plan para ti".
Un nuevo capítulo en su vida
Ahora, la cantante ha vuelto más fuerte que nunca tras triunfar como actriz. Su participación en el thriller '2:22 A Ghost Story' le valió, incluso, una nominación al Premio Oliver a la Mejor Actriz en 2022. “Recibí una llamada de un director de casting que estaba montando una obra de teatro '2:22 A Ghost Story' en el West End de Manhanttan. Le dije: 'No soy actriz'. Pero luego, hablando con David, me sentía un poco sin rumbo y realmente no sabía qué estaba haciendo con mi vida, excepto ser madre y establecer un nuevo hogar en Brooklyn", desvelaba sobre su situación en 2020, cuando, dice, ya llevaba dos años alejada de las adicciones. Su marido le propuso volver a llamar al director de 'casting' y cinco semanas después ya estaba comenzando a ensayar.
La cantante recordó recientemente el quince aniversario de 'Liccle Repress', anunciando que "está escribiendo" un nuevo capítulo en su historia y, en su música. Nuevos proyectos músicales y cinematográficos que, según ha escrito en redes, "escucharemos pronto".
