"Todos los días recibiendo barbaridades": Rocío Flores desenmascara a sus 'haters' con esta advertencia

Que Rocío Carrasco no se haya animado a hacerse cuenta en ninguna red social puede tener la motivación lógica de no querer tener que hacer frente a la cantidad de mensajes desagradables que podría recibir por parte de todo ese sector que se sitúa en el bando contrario al suyo. Porque qué duda cabe que su testimonio ha despertado una guerra, un debate que parecía llevar años enterrado -tantos como los que ella ha permanecido en el más sepulcral de los silencios-. Su hija, Rocío Flores, sí ha sido víctima de la ira de quienes se escudan en el anonimato de la red para soltar sapos y culebras.

Precisamente esta acaba de realizar una denuncia pública sobre esos mensajes que le llegan a su cuenta de Instagram y detrás de los que están unos 'haters' que han intensificado su actividad desde que su madre ha hablado de ella en ese documental que tanta cola sigue trayendo cuatro meses después de que se comenzara a emitir. Unos insultos, en esta ocasión, que tenían que ver con la trenza que lució en 'El programa de verano' horas después de que su madre, en su debut como defensora de la audiencia, apareciera con una muy similar.

Un peinado que la joven no se quitaba de manera inmediata tras salir de plató y por el que era insultada en las redes sociales. Flores quiso dejar constancia mostrando un pantallazo de esos insultos que había recibido como mensajes directos: "Quítate la trenza, payasa. Siempre luciéndote". Esas eran las palabras que mostraba en un pantallazo sobre el que escribía "de buena mañana". Los mimos que han provocado que, aprovechando el espacio que tiene en televisión, haya denunciado de cara a la audiencia de Telecinco.

Un problema creciente

"Todos los días recibiendo barbaridades, hace mucho daño. Es muy fácil criticar y hablar a través de una pantalla", se lamentaba en directo,poniendo de manifiesto la desagradable situación a la que tiene que hacer frente de manera periódica por parte de esos seguidores de Carrasco que le hacen la vida imposible. Como sucedería en el sentido contrario en el caso de que su madre contase con redes sociales, que de eso no nos cabe la menor duda.

Lo cierto es que Rocío Flores no es sino una más de todos los famosos que tienen que hacer frente a lo desagradable que resulta que gente anónima te machaque, de manera constante, utilizando las redes sociales. En los últimos días hemos visto cómo Irene Rosales, incluso, ha tomado la determinación de abandonar su puesto de trabajo en televisión ante los brutales ataques a los que ha tenido que enfrentarse. Tambien Beatriz Montañez, quien estaba tan tranquila refugiada en el ámbito rural hasta que se le ocurrió reaparecer para presentar el libro que había escrito y experimentó, de nuevo, la presión de situarse bajo la lupa mediática. ¿Lo peor? Que ellas son tan solo pequeños ejemplos del tremendo problema que supone el anonimato en las redes sociales y la ausencia de una legislación que haga entrar en cintura a quienes se aprovechan de ello.

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