Miguel Ángel Silvestre vuelve a creer en el amor con una joven de 24 años
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Parece que el 2020, aunque extraño que parezca, también tiene hueco y tiempo para que surja el amor. Numerosas son las parejas que han dado el bombazo al surgir el amor entre ellas este verano y ahora parece que la cosa continúa también en otoño. El último personaje público en ser pillado en plena velada romántica ha sido el guapo actor Miguel Ángel Silvestre.
Gracias a unas imágenes que publica SEMANA en su web hemos podido conocer lo bien acompañado que ha estado el actor por la noche madrileña abrazándose y tomándose algo en una terracita la mar de agusto. En las imágenes se aprecia la gran complicidad de ambos mientras se ríen y se muestran imágenes en sus respectivos móviles. Aunque su entorno más cercano ha asegurado a la revista que aún es pronto para hablar de noviazgo.
La nueva conquista de Miguel Ángel Silvestre de 24 años
La joven que podría haber conquistado el corazón de Miguel Ángel Silvestre se llama Claudia y tiene 24 años de edad. Esta estudió Claudia Estilismo y Dirección Creativa de Moda en la escuela de diseño del Instituto Marangoni de Milán (Italia), donde también ha trabajado supervisando y gestionando importantes sesiones de moda. Ahora pone en práctica todos sus conocimientos en el departamento de comunicación digital de Ágatha Ruiz de la Prada.
Gracias a sus redes sociales como Instagram podemos conocer un poco más a la joven Claudia. Y es que se define como una chica “muy entusiasta y creativa” y asegura que el haber residido hasta en cuatro ciudades diferentes como Madrid, Vancouver, Bruselas o Milán le ha aportado un bagaje personal que ha sabido transmitir en su carrera profesional.
La reciente ruptura de Miguel Ángel Silvestre
La última pareja que conocíamos que tenía Miguel Ángel Silvestre era la actriz Patricia Guirado. Una relación que él mismo confirmaba y hablaba de ella con unas emotivas palabras: “Me da un poco de vergüenza hablar de estas cosas… Es que es un concepto tan complicado de explicar. Es muy linda, muy cariñosa y es muy buena amiga mía”. E incluso iba más allá y añadía de manera anecdótica: “Tan a gusto está con ella, dice, «es muy bueno ir a tomar un bocata de chorizo con ella o ir al cine”.
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