Bad Bunny demuestra con esta portada que nadie le dice cómo tiene que vestir: "Puedo hacer lo que quiera"

"Me visto diferente": Estas son las declaraciones que hizo el puertorriqueño Bad Bunny hace ya algunos meses después de dejarse ver posando mientras nos mostraba, una vez más, su particular forma de vestir. Es un artista que nunca ha tenido ningún problema a la hora de dejarse ver tal y como es, sin renunciar a ser él mismo.

Él no tiene absolutamente ningún problema a la enseñanos quién es por dentro y por fuera y, como era de esperar, esa no iba a ser la primera vez que le íbamos a ver posando vestido con una falda. Lo comprobamos este mes con la nueva portada de la prestigiosa revista de moda y tendencias Harper's Bazaar, en la que podemos ver al cantante en una portada que ya está dando que hablar.

Sí, es bien cierto que una fotografía así llama la atención, pero antes de nada hay que destacar que esta es la primera vez que un artista latinoamericano protagoniza la portada de una revista en la que históricamente sus portadas siempre han pertenecido a las mujeres. Este hito ya nos demuestra la relevancia de su figura no solamente en la música, sinó también en la sociedad, donde asume un papel privilegiado.

"Es el artista más escuchado del mundo", apunta la revista, que destaca que Bad Bunny ha logrado su meteórico éxito manteniéndose fiel a su sonido, a su estilo personal y a las causas sociales que lo mueven. Y así nos lo demuestra en este nuevo número dedicado a los veintiún iconos de la cultura que destacan por sus diferencias en una sociedad en la que estamos acostumbrados a lo establecido.

"Estoy aprovechando este momento de mi vida en el que puedo hacer lo que quiera y usar lo que quiera para poder vivirla de manera más auténtica", asegura el cantante en la edición del mes de septiembre de este magacín. Es bien cierto que estamos hablando de uno de los artistas más influyentes de la música urbana y que cualquier cosa que toca se convierte en oro, algo que sin duda sabido aprovechar para abrir barreras a la hora de dejarse concocer.

Él ha roto estereotipos y lo demuestra una vez más de forma pública mientras viste con prendas que están alejadas socialmente del esteretipo masculino. Y es que en la entrevista que incluye la revista ha detallado cómo recuerda cuando iba de compras junto a su madre: "Siempre recuerdo ver las piezas con ropa de mujer: Siempre me quedaban mucho mejor a mí", destaca.

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De esta misma manera, ha querido reconocer que durante el lanzamiento de su carrera artística no podía permitirse ser como es por miedo a parecer demasiado diferente, pero es bien cierto que el tiempo le ha ido colocando en su sitio, permitiéndole ser él mismo, algo que incluye vestirse y sentirse como le dé la gana. Sabe que trabaja en una industria machista, pero que no iba a permitir que eso marcara su destino: "Al comienzo de mi carrera traté de fingir que era alguien que no soy, pero aprendí que esa es la forma en que los artistas se pierden a sí mismos", asegura.

Ahora que es consciente de su papel en el mundo de la música y del poder que eso le otorga, se siente más libre para hacer lo que quiera sin permitirse pensar en el qué dirán. Además, asegura que no lo hace ni para llamar la atención ni para querer destacar pareciendo diferente, "No lo hago para ser más famoso ni para llamar la atención ni para faltarle el respeto a nadie", explica, "La gente puede pensar que tengo una estrategia o que me pongo esto para llamar la atención, pero en realidad sé quién soy".

Al margen de su aspecto para la portada -que ya está dando la vuelta al mundo-, Bad Bunny ha querido destacar también el importante papel de los trabajadores latinos en la sociedad americana: "Al final del día, mi éxito en Estados Unidos se lo debo a los trabajadores latinos que han ayudado a hacer del país lo que es hoy".