El 'zasca' viral a una mala reseña en Google a un centro de depilación: "Buena estancia en prisión"

Hay veces que es mucho mejor mantenerse callado o con las manos en los bolsillos para no caer en la tentación de escribir en las redes sociales cosas de las que vayamos a arrepentirnos. Hoy traemos un ejemplo de ello que, esperamos, sirva para que reflexionemos sobre la conveniencia o no de escribir una reseña en Google del establecimiento de las características que sean si las probabilidades son de recibir una respuesta épica de esas cuyo eco resuena en los confines de la red. Porque una clienta que osó poner una mala puntuación a un local de depilación al que asitió, quedó al descubierto por el responsable del local, quien decidió contar su versión y darle réplica.

Una tal Rebecca -la cliente- escribía: "Pésimo, no merece la pena este centro". Por supuesto, unas palabras que eran acompañadas con una sola estrella de las cinco que se pueden dar en este servicio de Google. Como decíamos, lo interesante no es que esta no quedase satisfecha, sino la contestación que tenía lista para ella el encargado de las redes del mismo. "Hola Rebeca Simón", son las educadas primeras palabras antes de la gran traca: "No me extraña, tuvo que venir la policía y te llevaron esposada y detenida". Y termina con un deseo: "Buena estancia en prisión". Aquí rescatamos el tuit que se ha hecho viral y que parte de una mujer que se metió en Google para buscar centro de depilación y se encontró con esta auténtica telenovela de la que, ahora, tenemos curiosidad de cómo termina.

Reacciones a la historia

Lo cierto es que el relato es de lo más surrealista y eso da mucho juego a la hora de escribir comentarios bajo ese mensaje original. Y podemos asegurar que los hay de todos los tipos. Por si no nos creeis, y más allá de apuntar que esta usuaria que nos ha regaldo esta perla confirma que es el centro que eligió para su tratamiento de belleza, hemos rescatado algunas de esas frases que más nos han llamado la atención: "Entra a mirar reseñas del cuartelillo de la policía a ver si tampoco le ha gustado a la pájara"; "Cómo coño puedes salir esposada de un centro de depilación"; "Centro de lapidación"; "Tiene muchos más comentarios negativos y una dueña poco humilde"; "Pobre. Seguro que le tomaron el pelo"; "¿Desde cuándo dejan usar móviles o conexión a Internet a los internos en centros penitenciarios?"...

Sí, esta última pregunta también nos la hemos hecho nosotros, pero nos gusta más creer que es cierto lo que cuenta el dueño del local y que aquella escena bizarra, con la clienta saliendo esposada, fue una realidad de las que muy pocas veces se ven.