El último comentado guiño de Carlota Corredera a Rocío Carrasco en plena desaparición mediática de esta
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El color fucsia es el símbolo feminista más distintivo en el país desde que se emitiera por televisión, ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’. Sin duda alguna, un color que también ha traspasado la pequeña pantalla y es que, Rocío Carrasco acudió a las grabaciones de su docuserie con un traje de chaqueta de dos piezas con este color que, a día de hoy, se ha convertido en toda una tendencia.
Tras la emisión de todas las entregas, fueron muchas las caras conocidas, amigos o ‘enemigos’ de la hija de ‘La Más Grande’, los que optaron por este color en el comienzo del verano. Tal fue así que su hija, Rocío Fores y Gloria Camila Ortega, su hermana, con las que no mantiene ningún tipo de relación, las que aparecieron públicamente en diferentes eventos con este color que ya se ha convertido en un sello distintivo. Paralelamente fueron muchos los que opinaron que era una llamada de atención hacia Rocío, aunque lo negaron rotundamente, alegando que, “era un color que estaba de moda”.
Sin embargo, objetivamente, no se ha convertido solo en una moda. Uno de los mayores apoyos de Rocío Carrasco, Carlota Corredera, presentadora de ‘Sálvame’ y encargada de ser el hilo conductor de la serie, ha compartido en sus redes sociales un ‘selfie’ sin maquillaje y lo ha titulado “Intensidad en fucsia’ en donde la protagonista es una camisa de lino que resaltaba su color de piel veraniego.
Por otro lado, no es la primera vez que Carlota ha presumido de llevar este color, con un claro guiño a Rocío Carrasco. “Todo al fucsia”, destacaba así en el pie de foto.
No cabe duda que Carlota y Rocío han formado uno de los ‘tándem’ más consolidados de la cadena, además de haber creado una amistad que, sin duda, tiene toda la pinta que sea duradera. Sobre esta amistad, es importante resaltar que no nació a raíz de 'Rocío, contar la verdad para seguir viva', si no que, desde hace muchos años Corredera ha sido una gran defensora de la hija de Rocío Jurado, pues acudió a su boda con Fidel Albiac.
El bando fucsia
Carlota Corredera se posicionó, desde un primer momento, del lado de Rocío Carrasco. Hasta el punto de no permitir, mientras ella estuviera presente en el plató, que se dudara de su testimonio. Ya no eso, sino que ha llegado a cortar a quienes no opinaban como ella y se colocaban en el otro lado de esta guerra en la que Antonio David Flores, antaño colaborador de 'Sálvame', era despedido de manera fulminante y dado la espalda por la inmensa mayoría de los que habían sido sus compañeros.
A la presentadora le ha salido cara, en términos de imagen, la posición que ha adoptado. Es la revista 'Semana' la que ofreció los datos de una agencia de 'marketing' que demuestran que su popularidad ha sufrido un importante desplome desde que comenzara a emitirse 'Rocío, contar la verdad para seguri viva' y ella defendiera a capa y espada a la hija de Rocío Jurado. Sin admitir, dentro de su discurso, la flexibilidad o los puntos de vista de otras personas que, ya bien delante de las cámaras o en las redes sociales, pudieran opinar de una manera diferente a la suya. No hay nada más que recordar ese tenso momento con Antonio Montero, que terminó por salir del plató, con quien se negó a seguir compartiendo espacio tras asegurar este que Carrasco le parecía una "mala madre".
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