La preocupación de Elena Tablada por las serias secuelas que le ha dejado la Covid en su memoria
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Elena Tablada pertenece a ese amplio sector de la población que se ha contagiado de coronavirus en algún momento del casi año y medio que dura ya la pandemia. Y, de entre ellos, es de esos que han visto cómo las secuelas que les ha dejado la enfermedad le están causando inconvenientes para manejarse en el día a día. Ha sido la propia diseñadora quien ha revelado que está sufriendo las consecuencias a pesar de que hace meses que superó esa dolencia.
"Hoy he tenido una resonancia magnética craneal, proque el Covid me dejó secuelas de que pierdo bastante la memoria. Además, padezco una claustrofobia horrorosa, la desarrollé cuando nació mi hija Ella, y os voy a enseñar un vídeo que ha sido lo único que me ha conseguido relajar todo este tiempo y encima me ha provocado unas risas acordándome de cuando mi abuela se hizo la misma resonancia", son sus palabras antes de mostrarnos la grabación de esa mujer que, precisamente, falleció como consecuencia de esta enfermedad.
Instagram.
Lo cierto es que a Tablada, que pasó por el coronavirus el pasado mes de noviembre, no puede evitar tener gesto de preocupación en ese vídeo en el que se muestra en una estancia de su casa a oscuras. Esta da paso a esa grabación en la que su abuela explica cómo lo ha pasado en esa máquina de cuyos resultados puede depender que logre la ansiada tranquilidad que persigue. Poder saber qué es lo que le pasa realmente y cómo poder recuperar la memoria para que las secuelas que le ha dejado la Covid queden minimizadas.
El desgarrador adiós a su abuela
Elena tuvo que decir adiós a su abuela, a quien estaba especialmente unida, el pasado mes de noviembre. "Así serás siempre para mí. La más divina, la más disfrutona, la más querida, la más cuidadosa, la que a todo le viene bien, la más sabia, la más cubana pero la española, la más optimista. Pero, sin duda, la más fuerte. Qué suerte la mía, mami, te lo debo todo", escribía entonces. También aprovechó, una vez pasado el disgusto inicial, para hacer una denuncia pública por el trato que había recibido del centro médico donde había estado ingresada y cómo sus últimos días los pasó en el más absoluto de los aislamientos.
Dos meses más tarde, en una demostración de cuánto la recordaba a pesar del paso del tiempo, realizaba una segunda publicación en su memoria en el mismo Instagram: "Esta fue la última vez que te vi, llena de vida, amorosa, elegante... y te llené de besos, caricias y abrazos. Te ibas cambiando de asiento por todo el sofá para estar cerca de Camila. Repetías: “ Ay chica, esta niña es igualita a mi, cuídala mucho y ponle su azabache". Un texto con el que hacía hincapié en el hecho de que los abuelos tendrían que ser eternos.
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