"Orgullo de madre": Anna Ferrer reconoce la fuerza insuperable de su madre, Paz Padilla
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Paz Padilla nos ha dado a todos una importante lección de vida y es que la presentadora ve la muerte de otra manera. Paz ha tenido que afrontar una época durísima tras tener que despedirse de su marido, Antonio Juan Vidal, a consecuencia de un cáncer. Una enfermedad que le arrebató sin embargo ambos tuvieron la oportunidad de despedirse con tiempo y sin duda valorar aún más su compañía. Está claro que para Paz, el dolor seguirá ahí para siempre, pero también entiende que hay que seguir mirando hacia el futuro y mantener la ilusión por lo muy difícil que sea. Es una filosofía que no ha sido entendida por todos, pero no cabe duda de que su forma de entender las cosas, ha ayudado a muchos que están pasando por lo mismo.
Su hija Anna Ferrer Padilla, no dudó en reconocer lo valiente que es su madre y a pesar de que le costó entender lo bien que lo llevaba al principio, ahora sabe que todo fue puro coraje, una forma de superar la triste realidad y mantener la esperanza. En su entrevista con Europa Press mientras acudía al concierto de Taburete, la hija de Paz Padilla quiso hablar sin reparos sobre esta filosofía vital que su madre adoptó ante el cáncer de su marido y que le ayudó a estar a su lado. Algo de lo que está muy orgullosa y que le ha dado una percepción muy valiosa para su día a día, y de la que se lleva mil lecciones: “Yo estoy muy orgullosa y he aprendido muchísimo de ella”. El libro de la presentadora plasma unos conocimientos vitales que suavizan el miedo de la muerte y la incertidumbre de cada día, sin eso, no hay vida y tenemos que afrontar cada día con optimismo.
Fue en julio cuando nos enteramos de la triste noticia del fallecimiento de Antonio Juan Vidal, el marido de Paz Padilla, después de una larga lucha contra un tumor cerebral. La presentadora llevaba preparándose mucho tiempo para ese momento y pudo despedirse del amor de su vida como ellos quisieron, además de que se ha tomado su muerte con una filosofía digna de admirar. En su funeral dio una imagen de entereza y tuvo un bonito gesto con él, dedicándole un monólogo, lo mejor que a ella se le da hacer.
En la entrada del féretro a la iglesia, Paz se puso la mano en el pecho mientras sonaba su canción favorita, ‘Te quiero my love’, y cuando terminó la celebración, familiares y amigos bailaron desde el altar como homenaje al que siempre será el amor de su vida.
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