Las "subidas y bajadas" de Jesús Mariñas, hospitalizado desde hace 20 días, en su lucha contra el cáncer

El periodista permanece ingresado, a pesar de que se presumía que sería enviado a casa rápidamente: los motivos por los que se está alargando la estancia
Jesús Mariñas continúa bajo supervisión médica tres semanas después de su ingreso hospitalario
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Fue el pasado 31 de marzo cuando el periodista Jesús Mariñas tenía que ser trasladado desde su domicilio hasta el hospital madrileño Ramón y Cajal. Lo hacía en un taxi, ya que la ambulancia que acudió a la llamada, dejó muy claro que no podía llevarlo a otro centro que no fuese el asignado por su zona de actuación. A pesar de la insistencia de Elio Valderrama de que era lo mejor para él, puesto que es allí donde se le está tratando del cáncer de vejiga que comunicó, mediante una entrevista, en pasado otoño que le habían diagnosticado. Así las cosas, se suponía que debía haber recibido el alta apenas unos días después, y la realidad es que lleva casi tres semanas alejado de su hogar.

Es 'Jaleos', la web de crónica social de 'El Español', la que ha dado la última hora sobre la salud de un hombre inquieto que sigue cumpliendo, desde esa cama del hospital, con sus obligaciones laborales y sus columnas de prensa. Esa es parte de la información que el propio Elio da a Jesús Carmona, redactor del mencionado medio, a través de WhatsApp. Unos mensajes en los que, además, ofrece la clave principal por la que permanece hospitalizado en vez de continuar con su recuperación con las comodidades que se suponen a la casa de cada uno.

Jesús Mariñas, hospitalizado con pronóstico reservado en plena lucha contra el cáncer de vejiga

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"Seguimos aquí de momento. Poco a poco. Está recuperado, pero ya sabéis cómo es esta enfermedad, de subidas y bajadas. Él está bien, escribe sus crónicas desde aquí. De momento, no baja la guardia con el trabajo. Está más pendiente de sus crónicas que de otra cosa", son las líneas de Valderrama a través de la aplicación de mensajería instantánea. Además, subraya que está comiendo muy bien gracias a su buen amigo Lucio, que tiene uno de los restaurantes más míticos de Madrid y donde es habitual ver a Mariñas. Más allá de los antojos de chocolate, la tortilla de patatas, el bacalao o las croquetas son algunos de esos manjares que le están haciendo llegar hasta esa habitación del Ramón y Cajal donde esta recibiendo los cuidados preceptivos.

Sus amigos, muy pendientes de él

Jesús ha podido comprobar, por si no lo tuviese claro ya, la cantidad de gente que le quiere y le aprecia. Lo ha hecho a través de las visitas y de todas esas llamadas que ha recibido durante estos 20 días. "Se ha quedado sorprendido con la cantidad de gente que está pendiente. Sorprendería saber las personas que le han mandado mensajes o que se han puesto en contacto con su marido para saber cómo seguía", explica a la web citada una persona muy cercana a Mariñas. La misma que explica que "su ánimo es inmejorable y su actitud envidiable. Muy al estilo de Jesús. Con sus bromas a las enfermeras y médicos". Dicen que entre los habituales que contactan con él se encuentrasn Joaquín Prat, Cari Lapique o la que fuera presidenta de la Comunidad de Madrid Cristina Cifuentes.

Entre quienes se pusieron en contacto con él poco después de conocerse la noticia, se encontraba una María Teresa Campos con quien siempre ha tenido una relación de amistad muy especial y que ya le dijo que, en el momento que saliera de ese hospital, tenían pendiente quedar en esa casa nueva en la que la comunicadora se instalaba hace unos meses.

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