El desgarrador recuerdo de Elena Tablada a su ‘mami’: “Llegué a pensar que serías eterna”
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Hace un año el corazón de Elena Tablada se rompió por completo al fallecer su abuela, a la que estaba muy unida, al no superar el coronavirus tras varios días ingresada en el hospital. Un vacío que no ha conseguido llenar y que le será difícil ya que era para ella como una segunda madre con la que compartió los momentos más especiales de su vida. De ella ha heredado también sus raíces cubanas, una tierra que adora y donde se casó con su marido Javier Ungría, con su abuela como gran protagonista. Unos momentos que ha querido rememorar en el primer aniversario de su muerte.
La empresaria le ha dedicado unas bonitas palabras a su ‘mami’, como la llamaba cariñosamente, junto a varios vídeos de esos momentos felices que tuvieron la suerte de disfrutar juntas. “Tú, fuerte, sabia, amorosa y con unos valores humanos y de familia que trasladaré a mis hijas y ellas a los suyos, tu legado vivirá por siempre”, ha comenzado diciendo. “Recuerdo cada vez que entraba en mi coche lo primero que hacía era llamarte por teléfono y escuchar tu: “dime, Hellen, mi vida”, ahora solo puedo intentar escucharte con todas mis fuerzas y, a veces lo consigo... a veces consigo escuchar tu voz aterciopelada, tu dulzura y esa cubanía que te caracteriza”, ha continuado.
Elena Tablada recuerda a su abuela en el primer aniversario de su muerte
“Tu educación, tu generosidad, tu saber estar, tu saber disfrutar, tu saber amar y tu forma de quitarle importancia a lo que no la tiene, a ser posible con alguna risa y una copita de champán, fruto de una larga vida, llena de pequeñas piedras que te quitabas del camino, siempre airosa y elegante, para continuarlo pisando aún más fuerte”, ha expresado Elena Tablada sobre su abuela, a la que echa cada día de menos ya que era una parte fundamental en su vida y en la de su hija Ella, de 11 años, que también echa mucho en falta a su bisabuela y recuerda todas sus enseñanzas.
Aunque hay algo que le hace encontrar consuelo y es el hecho de que se haya reencontrado con su marido, ‘el papi’, como llamaba cariñosamente a su abuelo, al que mencionaba cada día. “Te imagino (como me dice Ella que te vio) subiendo a las nubes, vestida de blanco, colocándote el pelo con esa delicadeza y tus manos siempre impecables pintadas de rojo”, ha dicho refiriéndose al recuerdo que tiene su hija de ella. Y es que su segunda hija, Camila, tan solo pudo disfrutar de ella con pocos meses por lo que solo podrá acordarse de ella cuando crezca y le muestren esos pocos momentos pero intensos que vivieron.
“Llegué a pensar que serías eterna”
“Con ese halo que ilumina allá por donde pisas, sin miedo, con la plenitud de lo que creaste aquí, mirando al abuelo y loca por abrazarle. Los imagino a los dos, bailando “Si nos dejan” y mirando hacia abajo regalándome una sonrisa”, ha dicho sobre sus abuelos. “Te quiero tanto que llegué a pensar que serías eterna, porque nunca me imaginé la vida sin poder tocarte ni admirar tu belleza envejeciendo diariamente. Sólo puedo darte gracias y darle gracias a la vida por los grandísimos abuelos/padres que he tenido”, ha expresado muy emocionada. “Si lo intento mucho, cierro los ojos y consigo sentirte acariciándome el pelo, haciéndome cosquillas y cantándome “en el tronco de un árbol” porque mientras que yo esté aquí tú seguirás viva en mí, y en cada uno de los que te queremos tanto. Nos vemos en aquella orilla para darte el abrazo eterno con el que no me pude despedir de ti. 17/11 un año sin ti…”, ha concluido.
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