La corona de flores más significativa para Mila Ximénez: "El eje del mal no te olvida. Siempre juntos"
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Era poco antes de las 13.30 de este jueves, 23 de junio, cuando se conocía que Mila Ximénez había muerto en su domicilio situado en la madrileña calle de Padre Damián. La colaboradora de 'Sálvame' nos dejaba después de un largo y duro año de batalla contra el cáncer de pulmón que, finalmente, terminaba con su vida. Sus compañeros de programa, a pesar de llevar días, semanas preparándose para el momento, aparecían destrozados en el plató en ese homenaje improvisado -en principio, el espacio iba a ceder su hueco en la parrilla de Telecinco para realizar la previa del partido que enfrentaba a España con Eslovaquia en la Eurocopa-. No menos conmovedoras eran las imágenes en el tanatorio.
Algunos optaban por cubrir sus ojos con gafas de sol. Otros, dejaban esa parte de su anatomía a la vista, mostrando cómo el dolor y las lágrimas habían hecho mella en las horas que llevaban llorando a Mila. Uno de los más afectados era Kiko Hernández. Porque, más allá de la relación laboral, eran amigos. Confesores detrás de las cámaras. De hecho, Hernández entraba tarde en el plató, cuando apenas quedaban diez minutos de ese especial con el que lanzar un aperitivo de lo que será el programa de este jueves, con más tiempo para preparse y digerir que tienen que hablar de ella en pasado.
Se fundía en un abrazo conmovedor con Jorge Javier Vázquez y, posteriormente, le dedicaba unas palabras de recuerdo a Ximénez que rompían hasta al corazón más duro. "Se me ha ido una amiga como pocas he tenido. Voy a tirar para adelante, pero me va a costar muchísimo", comenzaba, con los ojos hinchados que delataban el duro trago por el que estaba pasando. "Esos pequeños detalles los voy a echar tanto de menos… Por otro lado estoy enfadado porque a lo mejor ella en un año… es complicado pero lo quiero decir", continuaba antes de lanzar un reproche a los médicos que se han encargado de ella desde que se le diagnosticó ese cáncer de pulmón, a principios de junio de 2020.
"Las decisiones hay que tomarlas, con tu vida puedes tomar lo que te dé la gana pero he escuchado cómo se le daban esperanzas y ella quería saber la verdad y decir: ‘Que el último tiempo que me queda decidir lo que quiero’. Muy claros no han sido con ella, podría haber hecho otras cosas", se desahogaba Hernández antes de que Jorge Javier templara sus palabras advirtiendo que era un tema sensible y que la evolución de una enfermedad como la que padecía Mila era "impredecible".
Mucho más que una corona de flores
Pero, sin duda, lo que más ha conmovido de todos los gestos y detalles que Kiko dejaba en una jornada muy triste y agotadora, era la imagen compartida en sus 'stories' de Instagram de una de los cientos de coronas de flores que acompañaban a los restos mortales de la televisiva en ese Tanatorio de la M-30 hasta donde se desplazaron multitud de rostros conocidos para arropar a su familia y darle el último adiós. "El eje del mal no te olvida. Siempre juntos", rezaba la banda que adornaba a ese motivo floral. Sobre la instantánea, Kiko escribía: "Qué bonito es saber que siempre estás ahí". Un recuerdo a esa etapa en la que ellos dos y Kiko Matamoros formaron una alianza temida por famosos y compañeros.
Instagram.
No era el único recuerdo de Kiko en su red social a alguien de vital importancia para él. En su tablón colocana un 'post' fijo. Junto a una imagen en la que ambos aparecen con una amplia sonrisa, se puede leer: "Hasta siempre, mi amiga, mi cómplice, mi todo en el programa…no tendré días en mi vida para agradecerte todo el cariño y todo el amor que me has regalado durante estos 20 años, buen viaje…gracias…gracias…gracias…¡TE QUIERO!".
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