El accidente de Verdeliss que solucionó gracias a una de sus hijas: “Solo queda el susto”
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Verdeliss comparte su día a día en las redes sociales y muestra su vida cotidiana junto a su marido Aritz y sus siete hijos. No tiene problema en hablar sobre lo positivo y lo negativo de la maternidad y esta vez le ha tocado el turno a lo segundo. La influencer se llevó un enorme susto al pillarse la mano con la puerta de la furgoneta, chilló de dolor y por suerte una de sus hijas la escuchó y pudo salir airosa de la situación. Eso sí, durante unos días le quedará un enorme moratón en la mano.
Gajes del oficio, que dirían. Llevar a 7 niños al colegio no es tarea fácil y quieres hacer las cosas tan rápido que al final te olvidas de lo más importante y acabas pillándote la mano con la puerta del coche, como le ha pasado a Verdeliss. “Suerte que Irati me ha escuchado gritar... y ha regresado para abrir la puerta y liberarme”, ha escrito la influencer en las historias de Instagram mostrando cómo había quedado su mano después de ser “rescatada”.
Un pequeño susto que por suerte solamente ha quedado en eso gracias a la rápida actuación de su hija Irati, la segunda de los 7 hermanos, y ha querido tranquilizar a todos sus seguidores con el siguiente mensaje: “Mi mano estupenda! Me tomé antiinflamatorio y solo queda este pequeño hematoma. Tranquis, que tengo movilidad total... así que ni hay huesos rotos ni necesito ir al médico jeje. Solo queda el susto!”. Seguro que una buena ración de besos y abrazos de sus hijos y mucho amor hacen que ese moratón se cure más pronto que tarde, porque no hay mejor medicina que el cariño de los tuyos.
Porque como ella misma ha dicho en su propósito para este año nuevo, "todo llega y todo pasa". Una reflexión que ha querido compartir con su más de un millón de seguidores para empezar el año con buenos propósitos. "Y con esta reflexión me acuesto...esperando sacar más positividad en este 2020. Hay aspectos que no podemos controlar, pero en nuestra mano está la medida en que nos afecta... Es difícil, es todo un entrenamiento mental, pero quiero que mis días sumen y no resten. Vida no hay más que una", ha concluido.
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