¡Buenas noticias! Los chicles con sabor infinito ya existen
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Dejemos las cosas claras desde el principio. Masticar chicle cansa. Y ya mejor no hablamos del sabor porque como mucho te dura 2 minutos.
Pero un momento. Eso era antes. Ahora existe un chicle con sabor infinito. ¿No puedes creértelo? Pues ojo a esto.
Científicos japoneses han presentado una goma de mascar que genera descargas en la lengua para engañar a las papilas gustativas. Los científicos dicen haberse inspirado en el libro y la película de "Charlie y la Fábrica de Chocolates?.
El dispositivo, se llama ?chicle eléctrico ilimitado? y utiliza el efecto piezoeléctrico, un fenómeno en el que algunos de los materiales producen carga eléctrica cuando se comprimen.
El tamaño seguirá siendo de un chicle estándar. Aunque a diferencia de la goma de mascar tradicional, la versión eléctrica continuará estimulando las papilas gustativas durante todo el tiempo en que se le siga masticando.
Al parecer, este nuevo tipo de chicle solo es capaz de producir los sabores salado y amargo, aunque dicen los científicos que les gustaría ampliar los sabores desde el dulce hasta el agrio, gracias a unas variaciones del patrón eléctrico.
Nosotros en CADENA 100 somos de los que no le decimos no a un dulce, pero de momento creemos que es mejor que sigan haciendo pruebas con esta goma de mascar tan particular. Y es que aún no han debido de ajustar muy bien el sabor, ya que las 80 personas que se atrevieron a meterse en la boca el chicle aseguraron haber sentido sabores salados o amargos.Incluso dicen que hubo quien comparó el gusto de esta goma de mascar con unas pequeñas sardinas secas que se usan en Japón.
Así que efectivamente, y tal y como te hemos anunciado antes. No lo vamos a probar por si las moscas, hasta que estén definidos los sabores aptos a nuestras papilas gustativas.
¿Y a ti te ha gustado? Perfecto porque dentro de muy poco podrás degustarlo. A grosso modo, estará a la venta el para el 2020 aproximadamente según han dejado entre ver los creadores. Asique se acabó masticar un chicle y que se te quede la lengua pastosa de zapatilla.
¡Un kilo de besos para todos y a por lo que queda de lunes que ya está hecho!
