El renacer de Yiya tras volver de Supervivientes: "He vivido un calvario"

Tres meses aislados de sus familias y luchando por su propia supervivencia no es una experiencia fácil. Supervivientes siempre ha sido uno de los reality más duros de la televisión, y así lo han afirmado todos los que han ido. Tres meses en los que te replanteas muchas cosas, y empiezas a ver el mundo de una manera completamente diferente. Ha sido el caso de Yiya que, tras convertirse en la última expulsada del programa, ha confesado lo mucho que esta experiencia le ha hecho replantearse su vida: la que llevaba, y la que quiere tener a partir de ahora. De vuelta a la civilización, la joven ha reflexionado sobre cómo ha sido su paso por la isla, lo que más ha echado de menos y aquellas cosas en las que ni siquiera ha pensado.

Yiya, renovada y con más fuerzas

Visiblemente emocionada, Yiya ha disfrutado de la belleza del paisaje que la rodeaba, y de un apetitoso desayuno como el que llevaba tres meses sin comer. La joven ha reconocido que deja en Honduras muchos "lastres" que le impedían avanzar y evolucionar como persona, y ha contado que ha decidido que este sea un nuevo comienzo, una nueva vida: "Lo más importante que he aprendido es atribuirle a cada persona, a cada lugar y a cada instante su valor". Además, Yiya se ha mostrado agradecida porque "he aprendido sobre mí misma en un gran porcentaje, y he aprendido de otros". "Echaba de menos...no ser civilizada, que nunca lo he sido, pero sí la civilización y poder socializarme con la gente", ha reconocido la extremeña.

La ya ex superviviente se ha sincerado sobre sus muchos problemas personales, y ha confesado que, en la mayoría de las ocasiones, su única y peor enemiga ha llegado a ser ella misma: "Era un calvario infinito porque mi mente me atormenta mucho, entonces cualquier momento de aburrimiento era una tortura. Pero necesitaba pasarlo, necesitaba estar un tiempo a solas conmigo, con la verdad, con mi tormento mental y con mi aburrimiento para que todas esas tiritas, que afloraran y se fueran ¡Y juro que las he dejado allí!"

Yiya se ha acordado mucho de su familia, y ha reconocido las ganas que tiene "de volver a mi casa" y de "aprovechar, vivir, gozar mi libertad...". Y aunque ha adelgazado unos cuantos kilos, Yiya ha podido abrir su maleta después de dos meses separada de ella. La exparticipante de ‘Un príncipe para tres princesas’ se ha quedado asustada al ver sus antiguos atuendos ¡y nos ha enseñado la otra peluca que llevaba preparada para ponerse en la isla!

El aprieto de la organización tras las palabras de Yiya

José Antonio Avilés tuvo que explicar algunas de las polémicas en las que se ha visto envuelto ante Jordi González. El concursante se mostró evasivo y se negaba a hablar de forma clara sobre las acusaciones contra él, y en un momento de la conversación dio un dato que llamó la atención de su compañera Yiya y, claro, esta no se calló.

Tras su expulsión de ‘Supervivientes 2020’, el tertuliano televisivo todavía está en Honduras junto a Nyno Vargas y Yiya a la espera de regresar a España. Aparte de lo que ha podido saber a través de las conexiones del propio reality, Avilés reconoció que ha tenido la oportunidad de hablar por teléfono desde Honduras con su familia, alegando que: "La organización de este programa me facilitó un teléfono para hablar con mi familia, no he robado ningún teléfono". "Es cierto, a cada concursante cuando salen expulsados se le da un teléfono", expresó Jordi González. Pero tras la afirmación del presentador Yiya, que se encontraba junto a José Antonio Avilés durante la conexión con el plató, saltaba poniendo en un aprieto a la organización.

"A mí no me han dado nada”, dijo Yiya de forma espontánea. Jordi González daba rápidamente una explicación. El presentador aclaraba que a la concursante todavía no se le había facilitado un teléfono porque acababa de ser expulsada.

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