Irene Rosales, muy enfadada, irrumpe en directo en ‘Sálvame’ para dar un tirón de orejas a Anabel Pantoja

Desde ‘Sálvame’ han vuelto a hablar de las adicciones de Kiko Rivera y una de las colaboradoras presentes en plató era su prima Anabel Pantoja. Ella se encuentra desde que estalló la guerra familiar entre dos aguas, defendiendo tanto a su primo como a su tía Isabel Pantoja, pero esta vez la tonadillera no tenía defensa posible y, al intentar echarle una mano cuando le acusaban de no haber estado al lado de su hijo enfermo, ha hecho explotar a Irene Rosales. La mujer de Kiko ha irrumpido en directo en el programa llamando por teléfono y ha querido dejar, una vez más, las cosas bien claras.

La artista no estuvo al pie del cañón cuando su hijo estaba enfermo y eso es un hecho que tanto Kiko como Irene han recalcado siempre. Únicamente pasó con ellos una semana en el Rocío, pero eso no fue suficiente. Incluso sabiendo que igual su marido le regañaba en directo, no ha podido dejar pasar que se intentase justificar el comportamiento de la cantante en ese momento tan delicado en el que tanto sufrieron y ha hablado alto y claro. “Tenía que ver el momento para poderle ayudar, encontré el momento y mi suegra en el único momento que nos ayudó fue en el momento del Rocío. Podría haber ayudado, y lo digo porque es algo que me duele, a día de hoy seguimos sufriéndolo, eso no acaba de la noche a la mañana. Si Kiko dice que no había sentido la ayuda de la madre, es verdad, nos lo hemos tragado durante mucho tiempo”, ha querido dejar claro.

El enfado de Irene Rosales en ‘Sálvame’

Según Irene Rosales, la ayuda de Isabel Pantoja a su hijo “no se produce por la tranquilidad de que está en casa, pero da igual porque tenía una niña de 3 meses, otra niña de 3 años y un niño de 6. A consecuencia de eso soy como soy ahora, he tirado de cosas que me correspondían pero también a mucha más gente”, ha dicho muy enfadada. “Puedes huir de la realidad un mes pero al segundo mes... Yo también podría haber huido y ser cómoda, al año de estar con él podría haberme quitado del medio, pero tenía claro que iba a estar en las buenas y las malas. Todavía no era madre cuando sabía que quería ayudarle, pero había un niño de por medio”, ha dicho refiriéndose al hijo que tiene el Dj con Jessica Bueno.

“No tengo nada que hablar con Isabel, hablé para pedirle ayuda y para que supiese el problema de su hijo, y no hemos vuelto a hablar. Cuando habló de la infidelidad, me llamó un lunes, Kiko estaba mosqueado con ella y me dijo que si venía porque Kiko había vuelto a caer y le dije que no, que para nada. Pensaba que iba a haber más ayuda y no me lo tomé mal pero en el fondo sabía lo que había, jamás le iba a hablar mal de su madre. Llega un punto en que se sigue hablando del tema y a mí me duele porque llevo mucho a mis espaldas y la única que no se pone medallitas soy yo y sus amigos. No voy a decir nada malo más de su madre solo digo esto porque lo he vivido y sufrido”, ha querido dejar claro.

El recado a Anabel Pantoja

Y por último ha querido mandar un mensaje a Anabel Pantoja. “Ella cree eso pero en el fondo sabe que su tía podría haber hecho más, ella me ha dicho: ‘no sé cómo tú aguantas’, pero entiendo su situación, con la de conversaciones que he tenido con ella, solo en esto que sabe lo duro que es para mí, podría ser más flexible”, ha dicho Irene Rosales dirigiéndose directamente a ella. “No sé qué te ha podido molestar, solo he dicho que la culpa no la tiene ella”, se ha defendido. “Obviamente no la tiene ella, eso no la tiene nadie, es por circunstancias de la vida, pero en el momento que se da el paso para que se cure, podría haber puesto más de su parte. Eso no acaba de la noche a la mañana”, ha insistido la mujer de Kiko Rivera.

“No es que me siente mal pero llega un momento que lo que he vivido no se puede defender de esa manera, es tan fácil como decir: ‘mi tía se enteró y fue una decisión errónea porque esa no es la solución’. Llevamos 3 años con este tema y esto no se acaba de la noche a la mañana. Anabel, te enfadas tú sola, ha hecho muchas cosas bien pero cuando ha tenido un grave problema de salud y no ha estado”, le ha recalcado. Y finalmente le ha dado la razón. “Si se ha sentido molesta, lo siento”, le ha pedido perdón a su prima política. “Es un cúmulo de cosas, que se siga hablando, me he sentido con rabia. Tienes tanta saturación que a lo mejor no has sido tan clara”, ha concluido antes de colgar la llamada porque estaba sola en casa con sus hijas y no podía seguir hablando.

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