La etapa más crítica de 'Masterchef'

Mastechef es uno de los programas más exitosos que se emite en la televisión pública de este país, tanto es así que han hecho la edición para famosos y para niños, con grandes índices de audiencia. Además de dar la oportunidad a diferentes personas de seguir desarrollando sus cualidades culinarias, los espectadores aprendemos algo más del universo gastronómico, descubrimos increíbles innovaciones y conocemos a los chefs más famosos. Sin embargo, después de tantas ediciones la controversia le tendría que salpicar tarde o temprano, aunque en las últimas semanas se habla más de sus polémicas que del programa.

La organización se ve obligada a pedir disculpas

Una de las pruebas del último programa encendió las redes sociales, ya que se tuvo que ver en pantalla como se despellejaba, evisceraba y cocinaba una liebre, algo que según muchos espectadores era innecesario. Algunos de los concursantes se mostraron reticentes, pero viendo que no les quedaba alternativa acabaron cediendo para intentar ser los mejores. El chef Pepe hizo que la situación en redes empeorase aun más al decir: "Hay que enseñar a la gente que cuando come un plato de liebre en su casa, hay que cazarla, hay que eviscerarla, hay que limpiarla... No vienen envasadas".

La situación fue tan tensa que los espectadores abrieron una queja oficial contra el programa y tuvo que salir Toñi Prieto, la directora de entretenimiento de TVE, a dar explicaciones: "Pedimos disculpas a quienes haya sentido herida su sensibilidad ante estas imágenes; nada más lejos de nuestra intención. Es verdad que para formar a los futuros cocineros tienen que poner práctica muchísimas técnicas como puede ser depellejar un conejo o una liebre, o desplumar un pollo. Si no hacen esto, pueden tener una carencia a la hora de dedicarse a la cocina. En ningún momento ha existido maltrato animal porque el animal ya estaba muerto, pero en un futuro tendremos en cuenta estas apreciaciones".

El reproche de Miguel Ángel Muñoz

Miguel Ángel Muñoz demostró que con esfuerzo, empeño e ilusión todo se consigue, incluso cocinar grandes platos con técnicas vanguardistas cuando no sueles hacer nada más que pasta y ensaladas. Tras una gran exhibición de talento, consiguió ser proclamado vencedor tras una dura final frente a Cayetana Guillén Cuervo.

Hace unos días, el actor decidió acudir al restaurante creado a raíz de este talent show donde se ofrecen algunos de los platos creados por los concursantes. Aunque su cocido no se encontraba disponible, debido al calor, lo que más molestó al actor es que la imagen de su victoria no estuviese en el sitio que le correspondía. De hecho, era la fotografía de Ona Carbonell la que presidía la pared con imágenes de todos los vencedores, aunque realmente fue Miguel Ángel quien se proclamó como primer Masterchef Celebrity. Por ello, en sus historias de Instagram mostró de forma muy graciosa cómo cambió una fotografía por otra y, además, advirtió que esperaba que cuando volviese todo siguiese tal cual él lo había dejado.

La situación de Jorge Brazález

El ganador de la quinta edición de Masterchef está sorprendiendo mucho últimamente, aunque puede que no gratamente. Su relación con Miri fue una de las cosas más comentadas tras terminar el concurso y, aunque parecían muy felices e ilusionados, sin que nadie lo esperase decidieron poner fin a su relación. Esta relación de amor ha provocado que recientemente el cocinero se enfrentase con la presentadora Emma García en el programa Viva la vida, creando una situación muy tensa, y finalmente Jorge ha anunciado que no volverá a colaborar allí.

Además, el cocinero utiliza su Instagram para hacer todo tipo de reivindicaciones, pero bastante polémicas la verdad. De normal, Jorge siempre ha compartido gran parte de su vida en sus redes sociales, pero ahora está mostrando una faceta que no conocíamos, mucho más seria y crítica. Podría ser su etapa más dura, ha roto con su chica, ha dejado la televisión, pero ahora se centra en su próximo restaurante.

La edición más competitiva

La tensión se palpa en el ambiente entre los concursantes de esta edición de Masterchef. En realidad, siempre ha habido participantes que eran más competitivos que el resto, pero por lo general jugaban limpiamente. Sin embargo, ahora parecen ser comunes los engaños, las traiciones y el pisar a otro para llegar más alto. Estas actitudes están siendo muy reprochadas, tanto por los espectadores como por el público, pero todo sigue igual y parece que para ganar vale todo.