El drástico cambio de El Profesor para 'La casa de papel 3'

Creíamos que La casa de papel había terminado, ya que el argumento llegó a su fin y el robo había concluido, ya sea para bien o para mal. Sin embargo, su éxito ha sido tal que han decidido darnos más de esta historia tan interesante y trepidante que nos dejó enganchados al televisor. Quedan tan solo tres semanas, ya se ha iniciado la cuenta atrás, y ha sido el propio Profesor quien nos ha desvelado el por qué de su vuelta, algo que puede que haga que cambie su papel en la historia.

Esta serie no hubiera sido posible sin El Profesor, la cabeza pensante, el que maneja los hilos, el que, en inicio, no se mancha las manos pero asume todas las responsabilidades. A lo largo de las dos temporadas vimos como, poco a poco, tenía que salir de su zona de confort para actuar, obligado por las circunstancias, aunque él en realidad pretendía mantenerse al margen, únicamente utilizando su ingenio, inteligencia y conocimientos.

Durante años estuvo maquinando todo el plan, eligiendo el momento, el lugar, planteando las posibles variables y cómo solucionarlas, pero cuando llegó el momento no todo se puede controlar, ya que si hay personas muy volubles de por medio todo puede cambiar. Esto le obligó a salir de su cueva para destruir pruebas, ayudar a sus compañeros, distraer a la policía, hasta el punto de que él mismo se descontroló al encontrarse con algo que no tenía planeado.

La segunda temporada terminó con muchos giros de guion y, ahora, se plantea la posibilidad de que el personaje de El Profesor también cambiase. En ningún momento tuvo que usar el disfraz, siempre iba con un impecable traje, corbata y sus características gafas, tampoco necesitó careta porque nadie le debía relacionar con el atraco. Sin embargo, por lo que hemos podido comprobar con los carteles de se busca ya conocen su nombre y su rostro, por lo que no podrán actuar de igual manera. Además, en el vídeo en el que manifiesta sus intenciones aparece con el buzo rojo y la careta de Dalí y parece claramente dispuesto a meterse de lleno en el asunto, implicándose tanto o más que sus compañeros.