El desgarrador mensaje de Ana Obregón en el cuarto mes de la muerte de Aless: ''Ni la muerte ni nada''
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No hay palabras que puedan aliviar el dolor de Ana Obregón. Sin embargo, ella sí sabe qué decir cada 13 de mes, cuando se cumple un nuevo mes desde que su hijo Aless Lequio se fue.
Las redes sociales, sobrecogidas, la pasada tarde volvieron a arropar a Ana Obregón cuando más lo necesitaba, porque es el pequeño gran gestoq ue se puede tener con ella en un momento tan doloroso y delicado. La presentadora y actriz quiso rememorar a su hijo con una imagen juntos y un mensaje muy duro: ''Hace seis años que hicimos esta foto. Te acabas de graduar de dos carreras en una de las Universidades más prestigiosas del mundo: La Universidad de Duke @dukeuniversity Tu felicidad y mi orgullo de ese momento jamás lo olvidaré. Cuatro meses después convertida en un pozo infinito de tristeza se que algún día nos volveremos abrazar y a sonreír. Volveremos a vivir. Aquí o allí. Siempre juntos. Porque el cordón umbilical que une a una madre y a un hijo no lo puede separar nada. Ni la muerte. #4meses #alessforever'', escribió junto a una imagen con Aless en la celebración por su graduación.
Cuatro meses de vacío
Ana Obregón está en un momento muy doloroso y se está tomando su tiempo, todo el que necesita, antes de volver a recuperar su rutina. Algo que todavía ni se plantea. Aunque la actriz está muy arropada, lo cierto es que Ana no puede todavía retomar su vida, fue tanto el desgaste emocional de la enfermedad, tanta la lucha ante un final fatídico, que no puede. Esto es algo que ella misma ha comunicado en sus respectivas redes sociales.
Sus familiares y seres queridos no se separan de ella, para hacer algún plan tranquilo o simplemente para acompañarle en el silencio. La pérdida de un hijo no es algo qu se pueda aceptar o digerir, solo el tiempo y los recuerdos de tanto vivido pueden ayudar a canalizar el dolor y seguir caminando en su memoria, porque es lo que ''ellos querrían''. Eso sí, cada uno tiene sus tiempos y Ana lleva su ritmo.
Durante los últimos cuatro meses a penas ha salido de casa, no ha quedado con nadie, más que son sus hermanas, amigos muy íntimos y sobrinos. Ana se fue a Mallorca a desconectar de todo y allí continúa, apurando los últimos días de verano antes de volver a Madrid. Eso sí, no hay minuto del día ni segundo, que su corazón no lata pensando en su hijo y en su recuerdo. Esto es algo muy doloroso que preocupa a su círculo próximo, ya que ''les gustaría poder hacer algo más por ella para que comenzara a salir de esta situación tan triste'', aseguran. Sin embargo, lo único que les queda es saber que ella ''sabe que están ahí y que será la misma Ana la que les pida ir dando pasos cuando esté preparada''. ¡Fuerza Ana!
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