El aplaudido discurso de la 'influencer', María F. Rubíes, sobre la dura realidad de su posparto
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Con casi 900 mil seguidores a sus espaldas, María Fernández Rubíes se ha consolidado como una de las 'influencers' más relevantes de nuestro país, junto a otros rostros como María Pombo, Laura Escanes o Marta Lozano. Con quienes además de profesión, comparte andadura en la maternidad. La creadora de contenido ha cumplido su sueño de formar una familia junto al odontólogo Manuel Losadas, con quien tiene dos hijos, Nicolás de tres años y Patricio, que acaba de cumplir un año de edad.
En paralelo, la creadora de contenido ha tenido que hacer frente a las duras consecuencias del parto que, como confesó en una ocasión para la revista ¡Hola!, "fueron muy duras".
"Ser madre te cambia por completo. De repente tienes un bebé y tienes que conocerle y conocerte. Es, sin duda, un viaje maravilloso, duro a veces, pero maravilloso". Junto a esto contaba que, a pesar de ser el primero se recuperó físicamente en tiempo récord, "el postparto lo recuerdo duro. La episiotomía me dolía a morir y tuve que tratarme bastante la cicatriz porque me molestó unos meses. Con Patricio, el postparto mejor, pero físicamente me está costando más debido a mi diástasis y hernias que se han pronunciado más debido a este segundo embarazo", revelaba entonces para el mismo medio tras dar a luz a su segundo hijo.
LO MÁS DURO DE SU RECUPERACIÓN POSPARTO
Ahora, la 'influencer' ha visibilizado uno de los problemas a los que tuvo que hacer frente. Ha sido en su pódcast 'Tómatelo con vino', donde ha confesado las duras consecuencias de la episotomía a la que tuvo que someterse: "La realidad del posparto, yo tengo dos niños grandes, con cabezas grandes y soy muy estrecha, muy pequeña y por ahí no salía nada. Me tuvieron que meter ahí un tajo y me hicieron una episotomía que tuve muchos puntos. Hasta que me los quitan me estoy despertando de dolor".
"Lo he pasado francamente mal. No hay ninguna posición en la que pueda estar. Y, encima es una época en la que estás sangrando mucho. Luego, la gente quiere ir, obviamente a verte. Estás muy incómoda, o sea, tú tienes un bebé recién nacido, no vas a estar todo el día en horizontal. A mí me costaba tener relaciones íntimas porque eso había cicatrizado, no podía haber fricción, ni podía haber nada, era un horror. Le quiero dar luz a esto porque me parece super importante que la gente se trate después de un parto", ha confesado.
Sus seguidores han aplaudido esta iniciativa de la empresaria, compartiendo a su vez sus experiencias personales: "Cuando las influencers hacen las cosas bien, también se dice, como hablar de la realidad post parto y no pintarlo como si todo fuera el mundo de yupi"; "En efecto hay que hablar la realidad. Las que hemos tenido cesáreas también abriríamos un gran melón. Es una época durísima en la que nos obligan a aguantar: sufrir y callarnos. Ya es hora de que se hable más de las dificultades. Y al hospital visitas las mínimas. No es momento"; "Está mujer está contando exactamente mi experiencia cuando tuve a mi hijo"
