¿Por qué no debemos irnos a dormir enfadados?

Los expertos advierten: es algo que perjudica seriamente nuestra salud

audio

No deberíamos de irnos a dormir enfadados

Pulsa para reproducir el audio

  • Dani Acevedo

Tiempo de lectura: 2’

Dormir es importante y no sólo hacerlo durante un periodo de tiempo determinado (una media de 7 u 8 horas al día es lo recomendado por lo expertos, aunque no podamos cumplirlo siempre) sino tener también una buena calidad del sueño. Hay muchos factores que pueden perjudicar la calidad de este sueño: estrés, mala alimentación, falta de ejercicio físico... y problemas con nuestro estado de ánimo provocados por posibles enfados o discusiones.

El cuerpo humano y el cerebro, cuando llega la hora de dormir, buscan el mejor 'camino' para alcanzar ese descanso pero se entremezclan muchos pensamientos, planes y situaciones en nuestro día a día que pueden intervenir ese proceso antes de ir a dormir. Si cuando estás en la cama repasas cómo ha sido tu día y hay algo con lo que no estás del todo tranquilo, probablemente dormirás mal.

Si has tenido una discusión a lo largo de día y lo repasas antes de dormir, por mucho que ya se haya pasado ese momento de 'calentón', volverás a activar los mecanismos del cerebro que transmiten las emociones negativas al respecto de esa discusión: volverás a enfadarte, a preocuparte... El cerebro seguirá dándole vueltas a esos malos pensamientos y será difícil tanto conciliar el sueño como descansar profundamente cuando estemos dormidos. Entre otras consecuencias, si te vas a dormir enfadado pueden pasarte varias cosas:

  • Insomnio: aunque no lo padezcas, en estado de nerviosismo, te costará conciliar el sueño y no descansarás bien. Incluso podrías pasarte la noche en blanco y no dormir nada si el disgusto ha sido grande.
  • Te desvelarás fácilmente: si no estás en calma, tu cerebro no se relaja y no logra dormir profundamente.
  • Al día siguiente tu rendimiento será peor: si no descansas bien, no podrás concentrarte, tendrás cansancio acumulado y la jornada siguiente te costará llevarla con fluidez.

Antes de irte a dormir enfadado tienes muchas alternativas para evitarlo y poder descansar tranquilamente: habla con la persona con la que has discutido y trata de solucionarlo, intenta charlar con alguien de confianza que pueda ayudarte a calmar esa sensación de nerviosismo, prueba diferentes técnias de relajación (una ducha tibia, un momento de meditación...), toma una infusión relajante para calmarte, intenta pensar en otra cosa... ¡lo que sea para no ir a dormir enfadado!

En ¡Buenos días, Javi y Mar! hemos analizado esta noticia y, sobre todo, nos hemos parado a pensar en qué cosas nos pueden llegar a quitar el sueño... ¿a ti también te pasa?

CADENA 100