Eurovisión expande su marca con la futura celebración del certamen en Latinoamérica: ¿Nace LATAMvisión?

La Unión Europea de Radiodifusión -también conocida como UER- tiene en mente seguir expandiendo el universo de Eurovisión más allá de nuestras fronteras, las europeas, claro. Después de experimentar con el formato en Estados Unidos a través de una primera no muy exitosa edición, que fue emitida en la cadena NBC, parece que ahora tienen en su foco de atención puesto en Latinoamérica.

Según la organización del certamen, que sigue siendo todo un éxito creciente en nuestro continente después de siete décadas de celebración, es hora de seguir buscando nuevos fans en el resto del mundo, expandiendo una marca tan consolidada como es Eurovisión a otros mercados.

Y parece que ya está todo pensado, porque lejos de renovar la marca para un nuevo público, se va a mantener la esencia de su nombre para adaptarla bajo la nomenclatura de Eurovision song contest: Latin America. Así es como conoceremos a esta nueva versión del concurso, que añade la localización del nuevo territorio a su nombre, buscando la participación de todos los países latinoamericanos.

"¡Y a mucha honra!": Este es el eslógan que ha escogido la organización para presentar la edición latinoamericana del concurso, que parece que llegará antes de lo que pensamos. Este movimiento es de lo más justificado teniendo en cuenta que la última edición de Eurovisión ha generado más de 75 millones de espectadores únicos en YouTube desde 232 territorios repartidos por todo el mundo.

De hecho son los países de la América latina los que están más pendientes de los contenidos publicados a través de internet, convirtiéndose en un sustancioso mercado para Eurovisión. Argentina, Brasil, Chile y México son los países que más consumen su contenido, de ahí a que sea importante tener en cuenta estos territorios de cara a la expansión de la marca.

¿Cuál es ahora el próximo paso? Pues después de este sorprendente anuncio nos gustaría saber si la organización contará con el interés de todos los países del continente, que excluiría a Estados Unidos y Canadá, que ya cuentan con sus propias ediciones, aunque tengan una menor repercusión.

De hecho sorprende que después del fiasco que ha supuesto el primer intento por llevar la marca fuera de Europa -que se materializó en forma de programa de televisión bajo la marca "American song contest"- se lleve a cabo esta arriesgada operación. Imaginamos que se apoyan en los datos que reflejan el interés por parte de su público, pero aún así siguen siendo un mercado muy diferente al nuestro.

El objetivo de este Eurovisión latinoamericano sigue siendo el mismo que el europeo, tratando de elevar el legado de la marca mientras se apoya en la representación cultural local de cada país. La primera incógnita que se plantea es saber qué país acogerá esta primera edición latinoamericana del concurso, aunque seguro que no faltarán voluntarios.

Lo que sí sabemos es que España formará parte del proyecto muy activamente, ya que la UER se reunirá mañana mismo en Madrid con algunos miembros destacados del comité de Eurovisión de RTVE para abordar las posibles vías de colaboración de cara a celebrar el certamen al otro lado del Atlántico.