DÍA DEL LIBRO

¿Sabes cual es la mejor receta para dormir a pierna suelta?

Además de ser regular a la hora de irse a la cama o hacer ejercicio físico cardiovascular a lo largo del día, leer un buen libro te ayudará a relajarte
¿Sabes cual es la mejor receta para dormir a pierna suelta?

Tiempo de lectura: 3’

Sin duda son muchos los beneficios de leer antes de dormir. Leer un libro en la cama antes de dormir es para muchas personas una rutina cada noche. Leer antes de dormir y dar por finalizado el día, es una práctica que todos deberíamos tener en cuenta ya que está demostrado que nos ayuda a conciliar el sueño y que, además, este sea de buena calidad, ya que ayuda a reducir el estrés e induce la relajación. Sin ambargo, con la llegada de las nuevas tecnologías, esta práctica ha cambiado de manera radical y con ello, la calidad de nuestro sueño.

El móvil, la televisión o la tablet, están sustituyendo preocupantemente este maravilloso y saludable hábito. Revisar nuestras redes sociales, ver una serie o contestar WhatsApp no son precisamente actividades aconsejadas por la noche, ya que todas incluyen pantallas y la luz azul que emiten dificulta el inicio del sueño, se convierten sin saberlo en nuestro peor aliado si queremos dormir a pierna suelta, porque activan la segregación de melatonina, que es una hormona vinculada tanto con el despertar, como con los ritmos circadianos”, según afirma el Doctor Alejandro Guillén-Riquelme, Coordinador de la Cátedra del Sueño de la Universidad de Granada-LOMONACO.

Los expertos aseguran que la lectura es una de las mejores actividades a incorporar en nuestra rutina de noche. Además de sus conocidos beneficios para cuestiones como mejorar nuestra memoria o potenciar la creatividad, leer antes de dormir es una fantástica herramienta para disminuir el estrés de nuestro día a día, ya que “obliga” a nuestra mente a concentrarse en una única actividad, haciendo que desconecte de las preocupaciones y problemas cotidianos. Además, leer un libro antes de irnos a la cama o metidos en ella puede ser un elemento clave en nuestra vida que, convertirlo en un hábito, permitirá que nuestro cuerpo asocie esta acción con el sueño que está por venir y lo identificará con un momento de relajación.

“Para conseguir una buena calidad del sueño, se recomienda establecer una serie de hábitos que se repitan diariamente para tratar de condicionar al cuerpo a que inicie todos los procesos hormonales y biológicos que van a inducir el sueño. Así, si cogemos como rutina leer 15 o 20 minutos antes de dormir, nuestro cuerpo va a entender que estamos iniciando nuestro ritual de noche y va a responder con relajación y cansancio” explica el Doctor Alejandro Guillén-Riquelme. Eso sí, aconseja apostar por libros que no resulten demasiado estimulantes, ni adictivos, ya que esto puede generar el efecto contrario al que estamos buscando y mantenernos en vilo. ¿Lo mejor? Lecturas que nos acerquen a emociones sosegadas, con contenidos positivos y relajantes.

Cómo leer correctamente en la cama

Leer durante horas en una mala postura puede ocasionarnos dolores musculares y de cervicales debido fundamentalmente a posturas incorrectas que pueden soponer un problema para nuestra salud y que nos alejen de nuestro objetivo de alcanzar un sueño profundo y de calidad tras la lectura. Lo ideal sería coger nuestro libro y sentarnos en una silla o sillón de diseño ergonómico que cuide nuestra postura y, cuando terminemos, meternos en la cama a dormir.

Sin embargo, leer en la cama es un placer al que muchos no quieren (no queremos) renunciar. Toma nota de los cinco consejos fundamentales que debemos seguir para sumergirnos de una manera correcta y relajada en el placer de leer entre las sábanas.

  • Evitar posturas forzadas. Tenemos que colocarlos en una posición que evite doblar el cuello. Se desaconseja leer de lado y boca abajo, ya que hace que carguemos los hombros y las cervicales.
  • Sentados y apoyados en el cabecero o boca arriba. Una postura sencilla y apropiada es sentarnos apoyados en el cabecero de la cama, dando soporte a la cabeza con una almohada. En el caso de leer boca arriba, además de seguir usando la almohada, podemos mejorar la postura colocando un cojín bajo las rodillas, para que la espalda esté totalmente apoyada y las piernas se relajen.
  • Una distancia adecuada al libro. Leer en la cama puede hacer que nos acerquemos al libro más de la cuenta. Para evitar problemas de vista, los profesionales recomiendan mantener el libro a unos 35-40 centímetros de nuestros ojos.
  • La iluminación, muy importante. Muchas veces utilizamos la luz de la lámpara de noche para leer en el dormitorio, por lo que debemos asegurarnos de que ofrezca una intensidad adecuada y, sobre todo, procurar que esa luz provenga de detrás de nuestra cabeza. Al final, si no disponemos de una iluminación suficiente vamos a terminar adoptando una posición incorrecta y forzando nuestra vista.
  • Una base articulada, para los lectores más ‘pro’: Para aquellos que leen horas y horas entre las sábanas, una base articulada puede ser la mejor opción ya que su mecanismo nos permite regular y adaptar totalmente el respaldo, ofreciendo una posición ergonómica y adecuada.
CADENA 100