¿Sabías que la piel del pollo no es tan mala como te han hecho creer?

La piel del pollo siempre ha sido uno de los grandes debates entre sus consumidores por sus hormonas o calorías, pero ¿es eso cierto?
¿Sabías que la piel del pollo no es tan mala como te han hecho creer?

 

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Cuántas veces habremos dejado e tomar la piel del pollo pensando que es perjudicial para nuestra salud. Esa piel doradita que encanta a muchos y que es bastante característico del pollo asado u horneado. Muchos piensan que tiene una gran cantidad, de ahí que exista el mito de que si comes mucha piel de pollo pueden crecerte los pechos, o a los hombres por el exceso de estrógenos sintéticos.

El mito de la piel del pollo

La piel del pollo siempre ha sido objeto de debate. Unos dicen que tiene es alta en calorías y otra por razones de salud, ya que consumirla supone un alto riesgo por los químicos que pueda tener. ¿Pero es todo esto cierto? Pues existe diversas opiniones entre los especialistas. Algunos sí que consideran la piel de pollo una fuente de bacterias que podrían provocar la salmonela o la listeriosis. Otros en cambio aseguran que sí no encontramos ninguna anomalía en su tejido y aspecto se puede consumir perfectamente sin preocupación.

¿Existe algún riesgo al comer la piel del pollo?

Según informa un portal que se encarga de desmentir los mitos que existen al rededor de la ciencia aseguran que: la piel del pollo se puede comer sin riesgo, ya que esta cumple con las normativas vigentes. Cierto que la piel es la parte que más expuesta está del pollo, por lo que si existiese algún tipo de bacteria, lo primero en contaminarse sería la piel. Pero con un correcto cocinado y una buena higiene no habría ningún peligro.

La piel del pollo asado y las hormonas

 

Las hormonas en la piel

Otro de los grandes miedo entre los consumidores de este alimento es la gran cantidad de hormonas que podría tener la piel del pollo. Pero eso de la utilización de las hormonas con el fin de engordar a estos animales quedó ya en la historia. Desde el año 2006 la Comisión Europea prohibía el uso de estos antibióticos y hormonas en los alimentos.

Las calorías de la piel del pollo

Si somos de los que dejamos de consumir la piel por eso de las calorías, siento decirte que hemos perdido tiempo con ese tema. Lo que nos hará ingerir más calorías o menos, será la forma en la que lo prepararemos. La manera más saludable será la asada, ya que con esta cocción la grasa se desprenderá y se quedará en el jugo. Pero claro si decidimos comer el pollo frito, pues efectivamente tanto la piel como el propio alimento nos aportará muchas más calorías. Además está piel aporta grasas saludables que benefician a nuestra salud cardiovascular.

La piel del pollo y su cantidad de calorías

 

Así que si no quiere comerte la piel del pollo que sea por gusto no por otros miedos inexistentes. 

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