El abecedario de los alimentos ‘up’ para combatir la astenia primaveral
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La astenia primaveral no es plato de buen gusto ya que hace que nos sintamos sin energía y con pereza. Esta no afecta a todo el mundo pero sí lo hace especialmente en las mujeres, debido a los cambios hormonales. Para ello, hay ciertos alimentos tienen la capacidad de estabilizar estos desajustes.
AVENA
Es uno de los cereales más consumidos debido a sus cualidades nutritivas y energéticas. Por su riqueza en fibras y proteínas vegetales, que son absorbidas lentamente por el organismo, estabiliza los niveles de glucosa en sangre y aporta energía de manera constante para evitar los bajones.
CAFÉ
En dosis bajas o moderadas, la cafeína que contiene el café tiene efectos psicoestimulantes e incrementa el nivel de actividad. Además, intensifica las sensaciones de bienestar y energía.
CARNE DE AVE
Es más ligera y más fácil de digerir que las carnes rojas por lo que evitará que tengas una digestión pesada. Además, es rica en Vitamina B12 que evita la fatiga y aporta una dosis extra de energía, por lo que es considerado como un alimento antidepresivo.
ESPINACAS
Ricas en agua y sales minerales pero especialmente en ácido fólico, un nutriente esencial para dotar al organismo de energía y vitalidad.
KÉFIR
Es una combinación de bacterias y levaduras en una matriz de proteínas envueltas en otra matriz polisacárida llamada kefiran. Existen tres tipos: de leche, de agua y de té, aunque el que se recomienda para paliar los efectos de la astenia primaveral es el primero, que es una especie de yogur.
Los alimentos probióticos aportan bacterias beneficiosas que regulan la flora intestinal. Está comprobado que una flora intestinal desequilibrada contribuye a la depresión.
KIWI
Aporta grandes cantidades de vitamina C, hasta cinco veces más que una naranja. El kiwi además de estimular el sistema inmune equilibra los electrolitos del cuerpo.
MACA
Es una raíz que contiene elevadas dosis de aminoácidos y minerales (cobre, magnesio, hierro, fósforo) que luchan contra la fatiga y la astenia, aumentando los niveles de serotonina en el cuerpo y aliviando la depresión leve.
MARISCO
Los niveles bajos de vitamina B12 pueden ser un factor de riesgo para la depresión y su deficiencia produce fatiga, falta de aliento y pérdida de concentración. Obtendrás la dosis necesaria de esta vitamina, comiendo marisco.
NUECES
Contienen triptófano, un aminoácido clave para la creación de serotonina, también conocida como la “hormona de la felicidad”.
PESCADO AZUL
Se ha comprobado que la gente que sigue dietas altas en ácidos grasos esenciales como el Omega 3, tiene niveles más bajos de depresión. Dentro de este grupo se incluye el salmón, el atún, la trucha, las sardinas…
PLÁTANO
También contiene triptófano, el aminoácido clave para la producción de la hormona de la felicidad.
Estos alimentos no tienen un efecto inmediato, a excepción del café, por lo que es necesario incorporarlos a la dieta “a largo plazo”, para que los efectos sean notorios. Además, para una mayor sensación de bienestar, la alimentación debe combinarse con la práctica de ejercicio, un buen descanso y una buena hidratación que favorecerá la eliminación de toxinas.