El efecto de las valoraciones de clientes en las compras online

Desde hace ya bastante tiempo, las compras online y todo el mundo del comercio digital se ha abierto ante nuestros ojos para proporcionarnos una nueva herramienta de consumo con infinitas ventajas. Esta nueva forma de comprar y consumir es, sin duda, una auténtica revolución que cuenta con muchísimos puntos positivos, como la inmediatez y la comodidad en la compra o la facilidad para comparar precios.

No obstante, al no estar comprando el producto in situ, también nos vemos en la necesidad de tener que comprobar, de alguna manera, cómo es el producto que finalmente llegará a nuestra casa. Y en este punto es donde las reviews o reseñas toman la máxima importancia.

Pero, ¿en qué medida influyen estas valoraciones de otros clientes en nuestras propias decisiones de compra? A pesar de lo que se pueda pensar, la verdad es que esta herramienta que nos permite compartir impresiones y, sobre todo, poder conocer un poco más acerca de nuestros productos preferidos antes de comprarlos, cada vez está en más desuso.

Un estudio impulsado por el portal 10mejores.top concluyó que el 74% de los internautas españoles consultaba las valoraciones de clientes antes de decidir su compra, pero casi un tercio les otorgaba poca o muy poca credibilidad. Esto nos lleva a pensar que, a pesar de que las reseñas sirven, en principio, para ponernos en contexto, lo cierto es que acaban teniendo poca o ninguna relevancia en nuestro proceso de decisión de compra.

¿Por qué están en clara decadencia las reseñas en 2021?

Una de las grandes desventajas que tiene el sistema de reseñas al que estamos acostumbrados actualmente es que no cuenta con demasiados mecanismos que aseguren que una opinión de un cliente sea cien por cien real. Esto, con el paso de los años y el claro auge del comercio online, ha terminado provocando que muchos consumidores se den cuenta de que realmente no todas las reseñas que se leen en Internet son reales.

Después de muchos años familiarizándonos con el mundo online, la democratización de las compras por Internet y el aumento de la competencia entre vendedores, se ha llegado a un punto en el que la oferta debe destacar sobre las demás para alcanzar una mejor cuota de mercado.

Hace algunos años, muchos vendedores a nivel internacional se dieron cuenta de este aspecto, creando toda una línea de reputación online basada en las conocidas reseñas falsas. Así, muchos negocios veían una oportunidad de crecimiento y de mejor posicionamiento dentro de los gigantes de las ventas como Amazon, regalando sus productos y ofreciéndolos de manera gratuita a cambio de una reseña con 5 estrellas.

De esta manera, se ha llegado a un punto en el que es muy difícil saber si verdaderamente la reseña que estamos leyendo ha sido redactada por un verdadero consumidor o, por el contrario, forma parte de una nueva estrategia de marketing. Y, como siempre, el gran perjudicado ha sido el consumidor de a pie.

¿Qué efecto producen las reseñas positivas y negativas?

El mundo de las reseñas es verdaderamente complejo. Por una parte, los consumidores ya desconfiamos de ellas en cierta medida y, por otra, seguimos acudiendo a las reseñas para recabar algo de información. Esta dualidad se puede ver con mayor claridad cuando analizamos cómo influyen las reseñas según su enfoque, positivo o negativo.

Cuando buscamos información acerca de un producto en cualquier tienda online de Internet y nos encontramos con una serie de reseñas positivas, existe la tendencia a desconfiar del propio producto y también de esas opiniones que leemos.

Por el lado contrario, cuando lo que nos encontramos son reseñas negativas sobre un producto, la tendencia es mucho más clara: abandonamos casi de inmediato el artículo e, incluso, la web del proveedor.

Realmente se trata de una cuestión compleja que nos lleva, de igual modo, hacia el mismo fin: las reseñas son cada vez menos útiles. Para bien o para mal, el grueso de los usuarios hemos decidido que este método ya no funciona y que, a pesar de que sí nos puede dar algo de contexto, no es una forma definitiva de decidir si compraremos o no un producto.

Entonces ¿de qué nos podemos fiar para comprar en línea?

En definitiva, hoy en día no debemos fiarnos por completo de las reseñas para decidir acerca de nuestras compras. A pesar de que los gobiernos de todo el mundo parecen estar tomando ciertas medidas contra las prácticas deshonestas que rodean las reseñas, lo cierto es que todavía no se puede confiar en este método al cien por cien.

En este sentido, la mejor conclusión es que, si estamos comprando un producto práctico, en el que no tenemos que hacer mucha inversión, no nos esforcemos demasiado en consultar comentarios y nos fiemos más de nuestro propio instinto de compradores.

Por el contrario, si estamos buscando una inversión grande en un producto a largo plazo, lo más interesante será buscar y contrastar información más allá de las reseñas que podamos encontrar en la propia tienda online.

Sea como sea, está claro que las reseñas son un instrumento que va perdiendo fuerza con el paso de los años y que, dentro de relativamente poco tiempo, puede que ni siquiera formen parte de la decisión de compra de cualquier consumidor.