Hasta siempre José Maria Íñigo

El periodista y presentador de radio y televisión, ha fallecido a los 75 años.
Hasta siempre José Maria Íñigo
Hasta siempre José Maria Íñigo

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¡Buenas tardes! 100 besotes de Alba Vizcaíno.

Hoy, nos hemos despertado todos con esta fatídica noticia y aunque no me guste hablar sobre estas cosas, como compañero de todos los que nos dedicamos al periodismo, creo que es necesario escribir, recordar y homenajearle de alguna manera..

¿Qué recuerdas tú de José María Íñigo? ¿Cuándo escuchaste por primera vez su voz? Si te parece, vamos a empezar por el principio: Nació en Bilbao, en 1942, exactamente en la calle de los doctores Carmelo y Gil número 4. Es hijo de Daniel Íñigo y Felisa Gómez, los cuales cuentan que desde bien pequeñito ya le gustaba esto de la comunicación. Su primer matrimonio fue en 1970 con la diseñadora Josette Nahmias, con la que tuvo dos hijos. Más tarde, en 1984, celebró las segundas nupcias con el nacimiento de dos hijos más, con Maria Del Pilar Piniella Merino. 

Íñigo, trabajó en distintos medios de comunicación pero su primer contacto fue con un micrófono. Lo que él contaba, es que no tuvo que ir muy lejos (por suerte), ya que su primer contrato lo firmó con la radio de su ciudad, Radio Bilbao. Poco después, cerca de los 20 años, se traslada a Londres, y ahí también conoció las entrañas de las radios musicales. 

Fotografia de RTVE

Hasta que llegaron los 70 y saltó a la gran pantalla: La televisión. Fue fichado por el canal UHF y presentó el programa Estudio Abierto, que trataba de entrevistas, reportajes y variedades. Dicen, que hizo tan buen trabajo, que RTVE, la televisión pública, le propuso cambiar a la primera cadena. Él, evidentemente, aceptó y se convirtió en una estrella. Y es aquí, donde mucha gente le recuerda, ya que nada más y nada menos que 34 millones de españoles, vieron una de las mejores entrevistas de su trayectoria al mentalista Uri Geller.

Más tarde, realizó también un programa propio "Íñigo en directo" para la televisión vasca, hasta que en 1993, se volvió a Madrid para colaborar en programas de Telecinco. Una época, según ha contado siempre, más que maravillosa aunque hay una, que especialmente le hizo mucha ilusión: Ser sucesor de José Luis Uribarri para poner la voz a las retransmisiones del festival de la canción europeo, Eurovisión

Todo el trabajo durante todos estos años, le hicieron merecedor de Mútliples Tp de Oro, un premio Ondas y un Premio Antena de Oro. Sin duda, todo ello, firma su profesionalidad delante y detrás, de la radio y la televisión. ¡Gracias por todo!

 

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