Hacerse mayor

Reconócelo: No te gusta sentir que te haces mayor. Ni a mí, ni a tus padres en su día, ni a nadie?

El problema es que llega un día en el que, sin saber por qué, te das cuenta de que doblas los calcetines de la misma forma en la que te obligaban en casa y tanto te molestaba; por aquel entonces, a ti te daba igual cómo estuvieran con tal de encontrarlos y que fuesen iguales -o no-.
O ese domingo en el que te sorprendes a ti mismo madrugando para aprovechar el día leyendo, limpiando la casa o haciendo deporte, cuando hace unos años los únicos rayos de luz que te alcanzaban durante todo el día eran los del amanecer de vuelta al hogar para dormir cuanto hiciese falta.

Pues bien, últimamente se ha hablado mucho de este tema en Twitter con la frase ?Un día eres joven y al otro??
Muchos coinciden en una de las pruebas del algodón. Según la misma, sabes que has pasado la juventud cuando prefieres la última fila en los conciertos; realmente tiene sentido: sueles estar más cerca de la barra y nadie te empuja, pero antes? hace unos años necesitabas apalancarte en primera fila y sentir que ese artista por el que habías hecho cola durante horas te miraba al interpretar tu canción favorita.

¿Qué está pasando? Los años, eso es lo que está pasando o, mejor dicho, los que están pasando pero, ¿y qué pasa? Si lo bonito es pasar por todas las etapas?




Si no hubiésemos tirado tantos domingos, no apreciaríamos lo que pueden dar de sí si madrugamos un poco y nos proponemos que sean provechosos.
Además, en el caso de repetir los patrones paternos, ¿qué tiene de malo? Si hemos copiado algo, nuestro cerebro sabrá por qué, y esperemos que sea positivo.
Así que nada de complejos. Te invito a mirarte al espejo y decirte a ti mismo: ?Un día eres joven y al otro? ya sabes de qué va la película, conque juegas con ventaja y puedes disfrutarla cada día un poco más?.

Hablando de disfrutar? ¡vamos a abrirle la puerta juntos al fin de semana más largo de la radio!
Abrazo de Jordi Cruz.