#BarbieReal
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No todas las mujeres son rubias, delgadas y van perfectas las 24 horas del día. Bueno, en realidad, estas características las cumplirían un mínimo porcentaje de la población. Por eso Betty Strachan trabaja arreglando muñecas para que se parezcan a las mujeres normales y corrientes, es decir, ha bajado a la muñeca de sus tacones, la ha liberado de las minifaldas y los escotes y le ha quitado el maquillaje.
Betty, que tiene 28 años y es madre, ha querido normalizar a la muñeca y llevarle al terreno de la mujer cotidiana, la que no vive presionada por unos cánones de moda y belleza imposibles. Pero no se ha quedado en la superficie (en la delgadez de la muñeca) sino que le ha dado rasgos naturales que las niñas y adolescentes (la mayoría de las veces) creen que son "defectos". Estamos hablando de granos, de gafas, pecas, pelo encrespado...
Están siendo todo un éxito en redes sociales, pero es que esta mujer ya saltó a la viralidad de internet por crear a Barbies parturientas, Barbies que le dieran el pecho a su bebé u Barbies ocupándose de sus pequeños. Con esto quería normalizar la lactancia en público.
Las creaciones que vende Betty son muñecas con ojeras, vestidas en leggins y ropa de andar por casa, con moño y gafas, con pecas... Mujeres reales. Como Betty afirma ha hecho esto porque hacía falta diversidad. "No todos los niños nacen rubios con ojos azules".
¿Jugamos? Yo soy Grethel González, ¡feliz sábado!
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