¿Adiós a los bares?

¿Me permites que te haga una pregunta?. Bien...Me lo tomo como un sí.

Se acaba el fin de semana y, seguramente, estos dias habrás visitado algún bar... ¡Ah, benditos bares! (como decía una de las campaña del famoso refresco).

El "bar" forma parte de nuestra vida. Hasta si no sueles visitarlos a menudo, sucumbirás en varias ocasiones. Piénsalo; cuenta mentalmente las veces que visitas un bar a la semana, al mes, al año, y ponte a sumar. Seguro que más de una o uno, os asombráis y perdéis la cuenta.

En un bar... quedamos, bebemos, nos reunimos, comemos, charlamos, compartimos, descansamos, nos reimos y también lloramos... en definitiva, "socializamos". No existe un pueblo, un barrio, una aldea sin bar en nuestro país... La "universidad de la vida", como dicen los mayores; servilletas de papel, huesos de aceitunas y palillos, el ruido de la tragaperras, la máquina de tabaco al lado.

Mira lo que dice la wikipedia sobre los bares en España: 

"...son un popular fenómeno social que ha marcado la cultura y las costumbres de numerosas generaciones..."

Los bares son lugares de encuentro y reunión en plan informal por definición, es esa barra la que los define y en la que "ocurre" todo o casi todo. A los españoles nos encantan y es tan común, que todo pueblecito, barrio o incluso calle importante, tiene uno o muchos más.

Hasta aquí, todo bien, ¿verdad?. Pues no; resulta que los bares tradicionales están bajando respecto a las franquicias. Los últimos datos de la Asociación de franquiciadores de España, revelan que éstas, están ganando terreno a marchas forzadas. En unos años, habrá menos bares tradicionales, ya que las nuevas fórmulas de negocio son mucho más rentables. 

Si una franquicia sale más barata, está claro que será la mejor opción para abrir nuevos bares. Además, los dueños se van jubilando y, cada vez, menos hijos quieren trabajar los locales de sus padres o, cuando lo hacen, acaban por cerrar.

Por el contrario, hay otra opción que sí está ganando terreno: la de los ciudadanos chinos. Muchos de ellos ya han comenzado a regentar bares de toda la vida por todo el país. Incluso, algunos de esos establecimientos han experimentado un auténtico renacer y cada vez hay más. La gente está encantada. Fíjate, concrétamente eso ha pasado en mi barrio. Hemos pasado de tener un bar antiguo, viejo y ruinoso, cuyo dueño estaba muy cansado, a un bar alegre, limpio, con sus tapitas, sus clientes fijos y unos chinos encantadores. ¿Resultado?. Está lleno todo el dia y el barrio está más alegre.

Cada bar tiene su historia, su gente, sus clientes fijos, sus aciertos y sus defectos. Todos están en la memoria de alguien y todos merecen seguir siendo únicos e irrepetibles. Seguro que tú tienes el tuyo.

Ojalá, las estadísticas y predicciones se equivoquen y no se pierdan tan pronto estos locales que nos han acompañado desde hace tanto tiempo. Yo, que soy una persona sentimental, no imagino mi ciudad sin ellos y pienso que las franquicias, nuestro futuro más cercano, nunca podrán ser lo mismo. De todas formas, esto es lo que tiene el progreso; los hábitos van cambiando y hay que ir adaptándose a lo nuevo por mucho que nos invada la nostalgia.

Desde CADENA100, aprovecho y os pido a todos los empresarios que luchéis con energía y no dejéis que se pierda una de nuestras tradiciones más arraigadas, lo que nos marca y nos hace ser diferentes y únicos... "Nuestros bares". Saludos de Ana Méndez.